«Iba a ser el hotel más moderno del estado Nueva Esparta». Así describen al complejo hotelero de Desarrollo Perlamar, que desde el 14 de noviembre de 2014 se encuentra en manos del Estado venezolano.
La infraestructura cuenta con aproximadamente 150.000 metros cuadrados de construcción. Carlos Guevara, abogado del desarrollo, explicó que 4 meses antes de ser inaugurado la Fiscalía inició un proceso legal en contra de la propiedad.
«Decidieron iniciar un procedimiento de investigación por supuesta legitimación de capitales en contra de la empresa. En realidad esto fue producto de un problema entre particulares con una de las personas que es parte del proyecto», dijo Guevara.
Agregó: «Entonces inició el proceso y se ordenaron unas medidas cautelares que conllevaron la ocupación por parte del Estado de ese inmueble y se suspendió la inauguración. Desde ese momento hemos tomado todas medidas legales que debíamos con el fin de demostrar que no existe ninguna posibilidad legal para que se den estas medidas cautelares».
Estructura desvalijada
Guevara denunció que la infraestructura de Perlamar fue desvalijada. Sostuvo que debe ser devuelta a sus dueños debido a que después de cinco años no han presentado una acusación formal y con sustento.
«Nos encontramos que no existe una persona natural acusada de legitimación de capitales o por cualquier otro hecho que conlleve una pena. Tenemos 5 años en esta situación y durante este tiempo el inmueble ha sido desmantelado y desvalijado. Hemos hecho todas las denuncias en los organismos correspondientes», aseguró.
Esta semana se registró un incendió en el lugar. «Si bien es cierto que el inmueble está ocupado por los custodios, pedimos una custodia periférica del inmueble. Anoche se produjo un incendio en uno de los pisos y aunque fue atendido por los bomberos, hubo daños bastante importantes».
Añadió: «Ha habido un desmantelamiento de la estructura que ya estaba lista para operar a partir de febrero del año 2015. Se han registrado robos a la infraestructura y todos estos hechos fueron denunciados y se abrió un proceso administrativo sobre los custodios».
A pesar del tiempo y de la situación en la que se encuentra el Hotel Perlamar, sus propietarios mantienen la esperanza de que la propiedad vuelva a sus manos.
«Han transcurrido los dos años que la ley da para que el Ministerio Publico realice las imputaciones penales cuando una personas comete un delito. Como es evidente, esto no se ha producido; por lo tanto, ya el ministerio no tiene posibilidad técnica de accionar. Le hemos pedido al MP el archivo fiscal para que se finalicé la averiguación y pueda ser retornado el bien a su dueño legal».