socialistas
El candidato Popular a la Xunta, Alfonso Rueda (i), junto a la secretaria general del partido en Galicia, Paula Prado, saluda tras resultar ganador de las elecciones gallegas este domingo, en Santiago. El resultado de las elecciones gallegas del 18 febrero deja la quinta mayoría consecutiva del PP, la primera con Alfonso Rueda al frente, un fuerte crecimiento del BNG, que ha concentrado el voto por el cambio aunque de forma estéril, una caída a mínimos históricos del PSdeG y la entrada en la Cámara autonómica de la formación localista y populista Democracia Ourensana. EFE/ Lavandeira Jr

Los socialistas españoles hicieron este lunes autocrítica tras la aplastante victoria del conservador Partido Popular (PP) en las elecciones regionales en Galicia, que supusieron un espaldarazo a nivel nacional para Alberto Núñez Feijóo, el líder de la oposición en España, aunque los nacionalistas de izquierdas del BNG cosecharon un fuerte ascenso.

La lectura a nivel nacional del resultado de las elecciones del domingo fue inevitable, sobre todo después de una campaña enfocada en ese mismo sentido, y desde las filas del PP se argumentó que Núñez Feijóo ganó el duelo electoral al presidente del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez.

En las elecciones autonómicas en Galicia, el PP revalidó su mayoría absoluta, con 40 escaños de los 75 del Parlamento regional, seguido por el BNG (25) y por el PSdeG (los socialistas gallegos), que se mantuvo en tercer lugar pero sufrió un desplome (de 14 a 9 escaños).

Este resultado se trasladó al escenario político nacional como baza de los populares con la que intentar acorralar a los socialistas, al recordar que han vencido en 11 de las 16 elecciones regionales celebradas en España desde mayo de 2023, dos meses antes de los comicios generales de julio pasado.

El propio Sánchez hizo este lunes autocrítica por los malos resultados, que achacó a la falta de tiempo para consolidar a su candidato, José Ramón Gómez Besteiro.

Con estos resultados, el PP sacó pecho de su mayoría en Galicia y esgrimió una nueva victoria de Núñez Feijóo sobre Sánchez, en unas elecciones, según dijo su secretaria general, Cuca Gamarra, que apuntan a «un nuevo ciclo electoral donde ha quedado claro» que el modelo Sánchez «no cuenta con el respaldo de los españoles».

El PP también usó los resultados gallegos para insistir en que representan un mensaje de la ciudadanía al Partido Socialista (PSOE) para no sacar adelante la ley de amnistía, que el Gobierno español negocia con los partidos independentistas catalanes a nivel nacional.

Sin representación la izquierda alternativa estatal y la ultraderecha

Uno de los grandes perjudicados de estas elecciones fue la formación de izquierdas Sumar, liderada por la gallega Yolanda Díaz, vicepresidenta del Gobierno de España y ministra de Trabajo, quien se estrenaba en su tierra con su plataforma en estos comicios y que no consiguió ninguna representación.

Sumar solo logró el 1,9% de los votos, y su candidata, Marta Lois, reconoció que para su formación fueron «unos malos resultados, sin paliativos».

La otra formación a la izquierda de los socialistas, Podemos, antiguo socio de coalición del Gobierno español y ahora desligado del bloque de Sumar, quedó como octava fuerza sin haber cosechado escaños, por lo que admitió que es necesaria «una profunda reflexión» para volver a «reconectar con la ciudadanía».

Desde el otro extremo, el de la ultraderecha de Vox, los resultados alcanzados son «malos para España» y por eso la formación de Santiago Abascal apóstó por una nueva acción política después de ver frustradas otra vez sus expectativas en Galicia, donde sigue sin lograr entrar en el Parlamento regional, el único de España que se le resiste.

El voto exterior

Los resultados en las elecciones regionales gallegas están todavía a la espera del voto exterior, que se empezará a contar el 26 de febrero, aunque el proceso podría alargarse como tarde hasta el día 29.

En Galicia estaban convocados 2,7 millones de electores, de los que más de 475.00 residen en el extranjero, muchos de ellos en Latinoamérica, lo que supone el 18% del censo electoral gallego.

En esta ocasión, votaron un 6,15% de los electores en el exterior, cinco veces más que en los anteriores comicios del 2020.

En Argentina, considerada popularmente la quinta provincia gallega (la región tiene cuatro), cerca de 200.000 gallegos podían votar en estos comicios.

Cuba era el segundo país, después de Argentina, con más votantes en el Censo Electoral de Residentes Ausentes (CERA) para estos comicios con unos 45.600.

Otros países con una importante colonia de gallegos son Uruguay, Brasil, Venezuela y Suiza.


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!