A pocos días de conocer quién se sentará en la silla de la Casa Rosada, las encuestas no vislumbran una victoria para el actual presidente de Argentina, Mauricio Macri. Las consultas afirman que Alberto Fernández continúa siendo el favorito para los comicios de este 27 de octubre.
La encuesta de Opina, divulgada el 17 de octubre por medios locales, registra una diferencia de 20 puntos entre ambos candidatos. Fernández, por Frente de Todos, cuenta con una aprobación de 52%, dejando atrás a Macri, por Juntos por el Cambio, que tiene un respaldo de 32%.
La consulta, en la que participaron 1.700 personas, tiene un margen de error de voto de 3%. Indica que 5% de indecisos y 1% votará en blanco o se abstendrá de ir a las elecciones.
El consultor Ricardo Rouvier entrevistó a 1.200 personas entre el 8 y 16 de octubre. El resultado da como ganador a Fernández con 52,3% contra 34,3% de Macri, lo que significa una diferencia de 18 puntos. Este estudio lo publicó El Clarín y tiene un margen de error de 2,8%.
La encuestadora Federico González & Asociados también registró la ventaja del peronismo (kirchnerismo) contra el macrismo. La muestra fue de 1.800 ciudadanos, que se entrevistaron entre el 14 y 17 de octubre. Aquí la conclusión es similar: Fernández se posiciona en 54% contra 31,5 de Macri, 22,5 puntos más que el gobernante argentino.
“La gran encuesta”
El internacionalista Luis Daniel Álvarez calificó las primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) como “una gran encuesta”. Este proceso, que se celebró el pasado 11 de agosto, terminó liderado por Fernández, que obtuvo 47,66% de los votos; seguido por Macri, con 32,09%, y Lavagna, con 8,23%. Del Caño, Gómez Centurión y Espert tuvieron más de 2%.
Álvarez señaló que la ventaja que consiguió el peronista en las PASO es bastante considerable para apoyar la posibilidad de que gane las elecciones presidenciales, incluso en la primera vuelta.
El experto considera que Fernández terminará sentándose en la silla presidencial porque viene con cierta fuerza. Reforzó que el candidato en esas primarias era adversario de Cristina Fernández de Kirchner y del aspirante a diputado Sergio Massa. Sin embargo, ahora los dos primeros compiten como equipo. “Entonces se pone cuesta arriba que Macri logre revertir los resultados de las PASO”.
Añadió que el objetivo de Macri es lograr una segunda vuelta en la que pueda unir factores, aunque será complicado.
El periodista venezolano residenciado en Argentina, Gabriel Bastidas, coincidió con Álvarez. Sin embargo, resaltó que para que Macri fuerce a una segunda vuelta, es esencial que Fernández no obtenga 45% de los votos ni cuente con una diferencia de 10 puntos.
La Constitución de Argentina establece en su capítulo segundo, artículo 98, que el presidente y el vicepresidente del país solo serán proclamados como tales si consiguen 45% de los sufragios y, además, si tienen una diferencia de 10 puntos con el segundo más votado en la primera vuelta. De lo contrario, hay que ir a un balotaje con las dos opciones más votadas 30 días después de celebrada la anterior.
Influencia de Cristina Fernández de Kirchner
Luis Daniel Álvarez considera que si Alberto Fernández gana las presidenciales, pondrá distancia con Cristina Fernández de Kirchner como ya lo ha hecho en el pasado.
Comentó que el candidato llegó a señalar a Fernández de Kirchner por hechos de corrupción “y montó tienda aparte. Sin embargo, hay sectores que sí intentan que ella tenga una influencia”.
En este sentido, recordó el caso ocurrido en Ecuador entre Lenín Moreno y Rafael Correa. El actual mandatario llegó de la mano del ex gobernante, incluso hasta fue su vicepresidente.
“Pero poco a poco fue apartándose de sus ideas y de su forma de gobernar, al punto de que que Correa intenta desestabilizarlo. A mí no me extrañaría que lo mismo pase con Alberto Fernández. Sobre todo, tomando en consideración que hay personas y sectores de tendencias radicales que son muy críticos con situaciones como la venezolana, que van a participar en el gobierno de Fernández”, explicó.
Continuó: “Yo creo que la influencia va a ser cada vez menor y si él es un hombre inteligente, va a tener su perfil propio. Si se deja amarrar por Cristina Fernández, no va a tener los mejores resultados”.
Después del triunfo de Néstor Kirchner, Fernández ocupó el cargo de jefe de Gabinete desde el 25 de mayo de 2003, y lo mantuvo tras la llegada a la presidencia de la senadora Cristina Fernández de Kirchner, a partir del 10 de diciembre de 2007. Sin embargo, en julio de 2008 renunció al puesto debido a la crisis por las retenciones a las exportaciones agropecuarias que originó un paro patronal, que se extendió por 129 días.
“Cristina no profundizó el modelo, lo perforó. Ella tiró por la borda todo lo que hizo Néstor (Kirchner). Hay muchas contradicciones entre los gobiernos de Néstor y de Cristina”, dijo Alberto Fernández en octubre de 2012.
Cristina Fernández de Kirchner como vicepresidenta
Álvarez precisó que además de las funciones protocolares que cumplirá una posible Cristina Fernández de Kirchner en la Vicepresidencia argentina, también estará a cargo de presidir el Senado.
Agregó que en ese escenario, se verá a una mujer que tratará de blindarse, de actuar de forma atropellante, que intentará imponerse y descalificar, lo que podría complicar la relaciones del Senado con la otra cámara del Congreso.
“Todo eso nos deja una imagen de que el vicepresidente debe tratar de conciliar entre los distintos factores. Un tema que la señora Fernández de Kirchner tiene en contra porque es poco conciliadora. Sin embargo, también podría tratar de aglutinar a los distintos sectores y aristas peronistas, pero tampoco tiene ella esa capacidad de aglutinar. Entonces va a ser una tarea difícil la que se le avecina y el panorama con miras a la relación Parlamento-Ejecutivo es complejo”, expuso.
Fernández apostará por el diálogo en Venezuela
El internacionalista aseveró que si Fernández consigue un triunfo, no estará activo en el Grupo de Lima o creando propuestas condenatorias como lo ha hecho Macri. Por el contrario, se enfocará en otros escenarios como el Grupo de Contacto e intentará un acercamiento con la Unión Europea, para que en Venezuela se dé una salida negociada y dialogada.
No obstante, aclaró que no cree que Fernández termine retratándose abiertamente con el régimen de Nicolás Maduro, “porque ningún político que tenga sentido de crearse una imagen y fortalecerse, va a tomarse fotos con algo caduco, decadente, cuestionado, denunciado y mal visto por la comunidad internacional”.
“Lo que sí ha dicho Fernández es que de ganar cambiará la postura exterior de Argentina respecto a Venezuela. Él no se ha atrevido a calificar a Maduro como dictador, y ya anticipó que marcará distancia con el Grupo de Lima, para tener una posición moderada junto a Uruguay y México”, reforzó el periodista Bastidas.
El comunicador social manifestó que entre la comunidad venezolana en Argentina existe el temor sobre lo que significaría la vuelta del kirchenerismo (peronismo) a la Casa Rosada, pues “Fernández no ha fijado posición con respecto a la situación de los migrantes, así que es una incógnita si tomará medidas para restringir el ingreso de venezolanos, como han hecho otros países. Hasta ahora, el gobierno de Macri ha mantenido una política de puertas abiertas y de total solidaridad con los venezolanos”.
El analista internacional Eloy Torres Román dijo, por otro lado, que si Fernández llega al poder va a cambiar el escenario económico en Argentina porque se encargará de retrasar el paquete de propuestas de reformas que planteó en un comienzo Macri.
“Sería un retroceso que no tiene ningún sentido. Lo más sensato es mantener el ritmo de reformas para profundizar y desarrollar la economía argentina hacia la perspectiva del siglo XXI”, finalizó.