Maduro
Prensa Miraflores / EFE

El Informe Anual de Libertades Religiosas que publica anualmente el gobierno de Estados Unidos reveló que el régimen de Nicolás Maduro aumentó notablemente la represión de religiosos en Venezuela.

“Líderes católicos y evangélicos denuncian que el gobierno de facto de Maduro y grupos dependientes de este, interrumpen el culto en las iglesias, atacaron a los feligreses y destrozaron mobiliario en templos”, indicó parte del informe que se publica cada año desde 2001.

Estados Unidos también alertó de un incremento del antisemitismo por parte del régimen. El trabajo explicó que medios del Estado califican al presidente interino de la República, Juan Guaidó, como una marioneta de lobistas del sionismo. Además destacaron que las críticas a Israel en esos medios de propaganda como Telesur son de tono antisemita, disfrazados de antisionismo, reseñó el diario ABC de España.

Aseguró que tanto Maduro como Diosdado Cabello repiten la acusación contra Guaidó de ser parte de un supuesto complot judío mundial.

El informe acusó al régimen de restar importancia al Holocausto, al compararse ellos mismos con los judíos perseguidos por los nazis. Esta práctica comenzó en realidad en 2017, cuando Maduro dijo en fragmentos televisados de un consejo de ministros que los chavistas son como los judíos perseguidos por Adolf Hitler

Acoso por parte de los colectivos

El trabajo resaltó que el régimen atento contra religiosos por medio de los colectivos armados. El gobierno estadounidense afirma que solicitó a Maduro varios encuentros antes de marzo de 2019 para tratar de negociar protecciones a los cristianos y a las minorías religiosas dentro de Venezuela que pudieran ser sometidas a persecución por su credo. Sin embargo, ambas naciones rompieron relaciones hace más de un año.

El 12 de octubre de 2019, la Dgcim arrestó al pastor protestante evangélico José Albeiro Vivas en el estado Barinas, mientras predicaba por la liberación espiritual del país. Vivas, que también es oficial de la fuerza aérea en servicio activo, fue acusado de desobediencia y permaneció detenido hasta finales de año.

Los colectivos, por su parte, atacaron iglesias y a sus congregantes durante todo el año, según este informe.

El arzobispo José Luis Azuaje denunció que el 27 de enero los colectivos forzaron su entrada a la iglesia Nuestra Señora de Guadalupe en Maracaibo, estado Zulia, durante una misa.

Agredieron e hirieron a 15 feligreses a quienes intimidaron con disparos. Además, vandalizaron la iglesia y robaron parte de su mobiliario. Azuaje aseguró que unos agentes de policía que estaban estacionados cerca no intervinieron durante el ataque.


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