El banco suizo UBS Group AG está rompiendo lazos con algunos clientes venezolanos a los que sirve desde Estados Unidos ante el incremento de las sanciones impuesta por el gobierno de Donald Trump contra el régimen de Nicolás Maduro.
Personas familiarizadas con la decisión revelaron a Bloomberg que la compañía realizó una revisión profunda y determinó que algunas relaciones no justificaban los riesgos de cumplimiento, afectando varias cuentas con vínculos con el régimen venezolano o con Petróleos de Venezuela.
Al menos 17 asesores en Estados Unidos con clientes venezolanos han abandonado UBS en los últimos nueve meses, según las fuentes y los documentos disponibles públicamente.
A los que quedan se les pide que intensifiquen su diligencia debida sobre los clientes venezolanos y sus fondos.
Los bancos están aumentando sus esfuerzos de cumplimiento después de pagar miles de millones de dólares en los últimos años por violar las sanciones de Estados Unidos o violar las leyes contra el lavado de dinero.
UBS administra un estimado de $ 2.000 millones a $ 3.000 millones en activos para venezolanos ricos de Estados Unidos, dijo una de las personas, una cantidad relativamente menor en comparación con el resto de sus negocios latinoamericanos.
Un pequeño número de clientes del país latinoamericano está reservado en Suiza, dijo una de las fuentes. Esas cuentas no se están cerrando.
UBS no revela públicamente la cantidad de riqueza que administra para los latinoamericanos, pero en una presentación de 2018 a los inversionistas, elevó la cifra a $ 108.000 millones de francos, unos $ 118.000 millones