Foto Archivo

El cantante español Raphael llegó a Nueva York este martes con su exitosa gira RESinphónico. Su único concierto en Estados Unidos, en el icónico Carnegie Hall, retumbó de aplausos y demostró una vez más que sigue vigente a sus 76 años de edad.

A los acordes de “Yo soy aquel” de la Orquesta Sinfónica de Nueva Jersey, el intérprete fue recibido con sus admiradores puestos de pie y aplausos de un delirante público. El artista los contemplaba y los aplaudía a su vez, en una sala con más de 2.800 almas.

A lo largo de la noche, Raphael, cuya voz resonó con fuerza en la antigua sala, contó con varios “bravo” y el público de pie con cada majestuosa interpretación. La primera de ellas después de “Loco por cantar” y “No vuelvas”.

El astro español, cerca de cumplir seis décadas en los escenarios, vistió de negro como acostumbra. Repasó temas que han marcado su carrera y la vida de muchos de sus admiradores que las convirtieron en sus preferidas. Ahora, Raphael las revisita con un sabor diferente.

Parada obligatoria

“Qué alegría estar aquí con ustedes. Gracias por venir”, indicó el intérprete, con dominio total del escenario y el público. Fue en 1967 cuando Raphael debutó en el Madison Square Garden de Nueva York y, desde entonces, esta ciudad es una parada obligada.

“He venido casi anualmente, he venido muchísimo a Nueva York”, recordó en una entrevista con Efe previa al concierto. Destacó que es un público diferente, “muy entendido, porque ven mucho teatro, mucho espectáculo durante todo el año”.

“Es una ciudad que te pone un poquito al orden. A mí me encanta tener visita al año a Nueva York”, afirmó el intérprete que llegó por primera vez al Carnegie por recomendación de la soprano Monserrat Caballé (1933-2018).

“En el Carnegie he hecho hasta tres días seguidos en contra de la costumbre de este teatro, que es de un día. Me he codeado aquí de las estrellas más grandes del mundo de la música clásica, Monserrat Caballé, (el violonchelista) Rostropovic, es un mundo que yo ni soñaba tocar… es un teatro más para mí, muy bonito”, señaló.

RESinphónico

El artista sigue con la misma energía y pasión y lo demostró este martes en escenario. Raphael llegó a Nueva York como parte de una extensa gira que comenzó en marzo en España para presentar su nuevo disco, RESinphónico, que incluye varios de sus grandes éxitos con sonido sinfónico y electrónico.

Así hizo un repaso de inmortales temas de su carrera como “Mi gran noche”, “Yo soy aquel” “No vuelvas”, “Loco por cantar”, “Provocación”, “Estuve enamorado”, “A que no te vas”, “Maravilloso”, “Volveré a nacer”, “Cuando tú no estás” y “Adoro”, de Armando Manzanero, y “Escándalo”.

También los tangos “Malena” y “Volver”, para lo que contó con una antigua radio en el escenario en la que se escuchaba a Carlos Gardel cantando su éxito. Acompañado por un guitarrista, interpretó “Que nadie sepa mi sufrir” y “Gracias a la vida”, que puso también al público de pie y del que recibió flores.

La gira

La gira continúa el 12 de octubre en Puerto Rico, y el 15 y 16 de este mes en República Dominicana. Luego regresa a España para continuar con RESinphónico hasta el 20 de diciembre.

Tras un receso navideño, el turno de Latinoamérica será en 2020, comenzando con México, seguido de Colombia y Ecuador.

Reinventarse, dice, es bueno para el artista y el público: “Que siempre está buscando su vuelta de tuerca”, dijo.

“Es otro sonido totalmente diferente, mucho más brillante, mucho mejor y me temo que no voy a poder abandonar esta forma de cantar como la de RESinphónico ya nunca”, aseguró.

“Voy a tener que hacer todo basado en eso, es una música mucho más avanzada, mucho más para el oído actual, mis canciones no pierden ningún sabor, al revés, le pone más en valor”, argumentó Raphael, que ya está en el estudio de grabación con su nuevo proyecto, cuyo nuevo sonido aún no define.

“Estamos en ese momento de ver por dónde tiramos, pero será algo explosivo también. Hay que renovarse o morir”, concluyó en la entrevista.

 


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!