José Miguel Vivanco, director de Human Rights Watch, exigió a Sebastián Piñera, presidente de Chile, proteger a todos los migrantes que están en su país, estén o no en una situación irregular. El sábado una marcha antiinmigración en la ciudad de Iquique terminó en violentos ataques contra venezolanos.
“Las imágenes son gravísimas, y son la primera evidencia contundente, inequívoca, de los hechos de xenofobia en Chile. Ha habido indicios en el pasado, pero esto ya ha cruzado la raya, esto es súper grave. La autoridad, el gobierno, tiene la obligación de proteger a todas las personas, no solo a sus ciudadanos sino también a los extranjeros que estén o no en situación regular o irregular, tengan papeles migratorios al día o no”, dijo.
El defensor de los derechos humanos, en una entrevista con el medio chileno T13, calificó los hechos violentos de bochornosos y manifestó que espera que sirvan para que el gobierno de Piñera tome iniciativas importantes y haga esfuerzos serios para erradicar de raíz la xenofobia en Chile.
“Es muy peligroso que esto avance sin que existan frenos por parte de la autoridad”, advirtió.
“Esto es un problema de carácter global. El fenómeno que se está dando en Europa, en África, en el Medio Oriente, en las Américas. Toda la controversia que existe en Estados Unidos, también los movimientos centroamericanos, aquellos que intentan cruzar zonas peligrosísimas que hay en la frontera entre Colombia y Panamá, donde hay grupos irregulares armados peligrosísimos y animales salvajes; son zonas selváticas y los migrantes, cuando toman la decisión de salir de su país es, porque están en una situación desesperada y saben más o menos los riesgos que se enfrentan y, aun así, toman la decisión de salir, con su familia, con sus niños”, agregó.
Un grupo de chilenos que participó en una multitudinaria manifestación contra venezolanos en Iquique quemó carpas, frazadas, juguetes y colchones que utilizaban migrantes que pernoctaban en espacios públicos a la espera de una solución a su situación.
“Las imágenes de Iquique probablemente son las más contundentes, las más impactantes, que se han dado en América Latina”, expresó el director de Human Rights Watch.
Vivanco dijo que el gobierno de Chile tiene además la obligación de construir un albergue para proteger a aquellos que ingresan a su país incluso de manera irregular. Lo que ocurre, enfatizó, es que hay algunos que piensan que, al levantar un sitio de protección temporal, se estaría estimulando la migración de personas sin documentación.
“Se equivocan profundamente. La migración va a continuar si la situación en Venezuela no mejora, si la situación en Haití tampoco. Los migrantes son una realidad y buscarán la forma de llegar a aquellos países que indiquen que tienen mejor posibilidades de sobrevivir, quizá porque tienen algún pariente o algún amigo, y creo que dejarlos abandonados en las calles, en las plazas, no es una solución”, manifestó.
Subrayó que a los extranjeros hay que ofrecerles, por razones humanitarias elementales, un albergue, aunque sea temporal, como lo está haciendo el gobierno colombiano con quienes ingresan irregularmente por la frontera con Venezuela.