Este miércoles a las 2:00 pm Said Alexander Díaz Páez, de 13 años de edad, murió frente al Colegio Diego de Losada ubicado en El Valle después de que recibiera un golpe en el mentón por parte de su agresor, un muchacho de aproximadamente entre 19 y 20 años, y luego cayera por causa del puño y pegara su frente en la acera. Según lo declarado por la madre de la víctima, Marielena Páez, su hijo estaba esperando a que su novia saliera de clases, justo a un lado donde varios estudiantes jugaban a las barajas. Mientras aguardaba, el mencionado joven de 19 años se acercó a él y empezó a “jugarse de manos” con Díaz. A consecuencia de ese juego, los ánimos se caldearon y el agresor subió la intensidad de sus golpes, causándole la muerte al niño. “Mi hijo le caía mal ese muchacho y le decía que no se jugara de manos así con él. Quiero que se haga justicia”, comentó la madre.

Después de lo ocurrido, las personas que estaban presentes en la escena empezaron a seguir al agresor, quien huyó corriendo del lugar. El director de la entidad educativa mencionada anteriormente, Alexander Calderón, contó que al saber sobre el estado del niño, hizo que llamaran a los bomberos y a la policía para poder trasladarlo a algún hospital. No obstante, Díaz murió pasados 10 minutos por el golpe en la cabeza. Said Alexander Díaz Páez estudiaba primer año en el liceo Luis Cárdenas Saavedra ubicado en Los Jardines de El Valle y era el menor de cinco hermanos.

Otra versión de los hechos

Según testigos  presenciales, Díaz estaba jugando a las barajas. En esos juegos, los jóvenes apuestan dinero y como el niño no tenía la cantidad que le debía a su atacante, éste lo agredió. Según lo contado por Alexander Calderón, él salió del colegio con el fin de saber por qué había tanto alboroto cuando se percata de que había un niño tirado en el suelo. Luego le pidió a los trabajadores que llamaran a los bomberos y a funcionarios policiales para auxiliar a la víctima.

El fenómeno de juego de cartas con apuesta se ha venido dando desde hace dos años atrás y en la institución educativa Diego de Losada hacen inspecciones para verificar si los estudiantes poseen barajas y así decomisarlas.


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