Una recién nacida fue abandonada en el cementerio municipal de Porlamar, en el estado Nueva Esparta. El llanto captó la atención de los sepultureros del lugar y los guió hasta el sitio donde la habían dejado, envuelta en trapos ensangrentados.
Los hombres denunciaron la situación ante la Dirección General de Centros de Comando, Control y Telecomunicaciones, reseñó Sol de Margarita. Posteriormente, al sitio llegaron funcionarios de Protección Civil de Mariño y de la policía municipal, quienes trasladaron a la bebé inmediatamente hacia el Hospital Luis Ortega.
En el centro de salud, recibió atención médica y los exámenes determinaron que se encontraba en buen estado de salud. El medio local señaló que los trabajadores sanitarios llamaron a la recién nacida Milagros del Valle.
La bebé, que tuvo un peso de 3 kilogramos y midió 50 centímetros, está bajo atención médica y diferentes organizaciones como Mano a Mano solicitan apoyo económico para costear los gastos relacionados con los pañales, ropa y fórmulas lácteas.
Los organismos de seguridad investigan los hechos y presumen que la madre reside cerca del cementerio de la capital margariteña. Este sería el segundo caso documentado en una semana en Porlamar de maltrato infantil.
Niña encadenada
Funcionarios de diferentes organismos de seguridad detuvieron la semana pasada a una mujer que mantenía encadenada a su hija de 6 años de edad, en la calle San Francisco del sector Genovés, en Porlamar.
Vecinos de Carla Valera, de 24 años de edad, alertaron de una situación a los oficiales porque presumían que en la habitación donde vivía, y que tenía alquilada desde hace algún tiempo, algo irregular estaba ocurriendo.
Al llegar al lugar, los uniformados se encontraron con la niña que, además de encadenada, estaba en estado de desnutrición, reseñó Sol de Margarita. Por este caso también resultó aprehendido Omar Pérez, de 57 años de edad, pareja sentimental de Valera.
La mujer golpeaba con frecuencia a la menor, según testimonios. Una vecina aseguró que la niña tenía una importante herida en su pierna derecha, donde la tenían amarrada; y que dormía en el piso cerca de desechos fecales.