Desde las 5:00 am, habitantes de Caracas inician la búsqueda de estaciones de combustible donde puedan surtir sus vehículos de gasolina, luego de que desde hace dos semanas se registrara una grave escasez en la capital.
Muchos denuncian que pueden pasar varios días en las largas filas y no logran abastecerse de combustible. Además aseguran que deben presenciar una serie de irregularidades de parte de funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana y la Policía Nacional Bolivariana, quienes actualmente tienen el control de las estaciones de servicio.
Lamia Martínez se encuentra en la bomba ubicada en Petare, en el sector Buenavista. Comenzó a realizar la cola, que llegaba a la altura de la Parmalat, en Macaracuay, a las 5:30 am; pasadas las 3:30 pm, aún no ha podido surtir su vehículo de combustible. Necesita mantener su carro habilitado para movilizarse a un hospital de la ciudad, donde tiene a un niño hospitalizado.
Denunció que los funcionarios de la GNB, la PNB y policía de Sucre abusan de su poder y tratan mal a quienes se encuentran esperando en la cola. Además, afirma que los oficiales dejan pasar a la estación únicamente a los vehículos de otros efectivos.
“Estamos aquí desde la madrugada y ellos dejan pasar únicamente los carros de los funcionarios. Llegó una gandola con 42.000 litros de gasolina y nos informaron que ovan a vender 15 litros por carro. Con eso no hago nada, porque mi camioneta carga 60 litros”, expresó a El Nacional.
Martínez también afirmó que los funcionarios venden las pimpinas de gasolina entre 15 y 20 dólares.
Añadió que en la estación de servicio de Las Mercedes la situación es similar: solo logran obtener combustible los funcionarios del Estado.
“Aquí hay personas que están desde las 11:00 pm y no han logrado echar gasolina. En la bomba de Las Mercedes se repite la historia, solo pueden surtirse los funcionarios”, expresó.