Solo 50% de los comercios en Lara han podido retomar sus actividades este año, y generar ingresos. La falta de combustible en la entidad, las pocas ventas y las fallas en los servicios básicos impiden a los comerciantes reactivar sus negocios por completo.
A la grave situación con los servicios básicos se le suma los pocos días que tienen los comercios, en Lara y en todo el país, para laborar por la imposición del esquema 7+7. La actividad económica está paralizada.
Eldi Montero, presidente de la Cámara de Comercio en Lara, destacó que los comerciantes comenzaron a trabajar el 4 de enero, pero el 11 inició la semana radical. “Los días de flexibilización en enero fueron muy pocos» dijo, citado por el medio La Prensa de Lara.
Para la mayoría de los comerciantes, en enero tuvieron que afrontar un duro golpe económico, explicó Montero. “Hubo un bajón en las ventas producto del bajo poder adquisitivo del venezolano”, señaló.
Otro de factor que influye a la baja producción de los comercios es el transporte público, indispensable para los trabajadores de la entidad.
Giorgio Reni, presidente de la Cámara, explicó que la escasez del gasoil empezó a agudizarse el mes pasado. A ello se sumaron los cortes de energía eléctrica que a pesar de no ser tan prolongados aún se registran, así como el esquema 7+7.
Todos estos factores también influyeron en los niveles de producción del sector industrial, el cual se encuentra en cifras rojas. 41% de las empresas están paralizadas, así lo reveló una encuenta realizada por la Cámara.
Para Reni los sectores económicos son importantes para que el país siga su rumbo. Asimismo, considera que no es posible que deban trabajar dos semanas al mes, (aquellos que no son priorizados).
El sector agroindustrial también está paralizado por la grave crisis en los servicios. La falta del combustible ha generado que deban paralizar maquinarias, procesos e incluso hasta traslados.
Más días laborables
Ante la situación, los comercios, empresas y productores de Lara piden trabajar las cuatro semanas de cada mes. Es decir, tanto en semana de radicalización como de flexibilización. Además de poder trabajar en un horario completo desde las 8:00 am hasta las 4:00 pm.
Tanto Reni como Montero aseguran que cada uno de ellos puede trabajar cumpliendo con las medidas de bioseguridad, tal como lo hacen durante la semana de flexibilización.
Representantes de ambas Cámaras explicaron que no es posible que existan sectores informales que laboran a pesar de no estar autorizados en algunas zonas sin importar si es semana radical.