Autoridades de Venezuela brindan «atención médica integral» a los presos trasladados de la cárcel de Tocuyito, intervenida el miércoles por el gobierno, a penales ubicados en otras regiones del país, informó este sábado el Ministerio de Servicios Penitenciarios.
A través de la red social X (antes Twitter), la titular de esa cartera de Estado, Celsa Bautista, mostró imágenes de la atención brindada a los privados de libertad en el Centro Penitenciario Agroproductivo de Barcelona y en el Internado Judicial de Barinas, dos de las cárceles que reciben a estos presos.
«Los traslados de la población privada de libertad que se encontraban en el Centro Penitenciario Tocuyito se han realizado con normalidad en los distintos establecimientos del país, garantizando los derechos humanos de la población», aseveró la funcionaria.
Agregó que el Ejecutivo sigue «garantizando» la «atención oportuna» de estas personas y de todos los detenidos del sistema carcelario venezolano, por lo que hoy están desplegados en un operativo en los estados Carabobo, Zulia y Barinas para atender los casos jurídicos de quienes están recluidos en las cárceles de estas regiones.
Ayer, en la misma red social, la ministra explicó que los trasladados desde Tocuyito «se encuentran en régimen penitenciario», lo que quiere decir que usan uniformes, cumplen rutinas y llevan el cabello rapado.
Al menos 1.658 armas -158 de fuego y más de 1.500 blancas- fueron halladas durante el operativo gubernamental desplegado en Tocuyito, la cárcel de mayor población reclusa del país, con más de 2.000 presos, según el gobierno.
El ministro de Interior y Justicia, Remigio Ceballos, aseveró el jueves que más de 8.000 funcionarios participaron en el operativo, en el que también hallaron «más de 12.000 cartuchos y sustancias estupefacientes y psicotrópicas».
Con la entrada en Tocuyito, la Policía y la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) han «desmantelado la mafia carcelaria» que operaba allí, a través de una lucha «constante» del Ejecutivo que, remarcó, no va «a dar cuartel a ninguna mafia».
Este operativo se llevó a cabo un mes después de la intervención de la cárcel de Tocorón, donde el Gobierno desplegó a unos 11.000 agentes de seguridad, tras lo que fue desmantelada «totalmente» la organización criminal transnacional Tren de Aragua, cuyo líder, Héctor Guerrero, alias Niño Guerrero, todavía no ha sido capturado.