Un preso de nacionalidad colombiana del Centro Penitenciario de Occidente (CPO), ubicado en Santa Ana, municipio Córdoba del estado Táchira, identificado como J. Palacios Castillo, se declaró en huelga de hambre.
El recluso asumió esta medida ante la falta de vehículo en el centro de reclusión para que lo trasladaran hasta un hospital para recibir tratamiento para sus síntomas de depresión, un dolor en sus dientes, fiebre y dos hernias, reseñó La Prensa del Táchira.
Pese a que el Tribunal Segundo de Justicia emitió dos órdenes de traslado a un centro asistencial, hasta la fecha no se ha ejecutado, por lo que Palacios tomó dicha acción.
Denuncia del preso tras huelga de hambre
Por medio de una carta, Palacios denunció que un grupo de diplomáticos del gobierno colombiano llegó hasta el centro de reclusión para constatar el estado de los detenidos, pero que a pesar de ello, no se les permitió el ingreso.
«Esto es una violación a mis derechos como extranjero injustamente detenido desde el 16 de febrero de 2021. La última vez que pude ver a un representante colombiano le denuncié la violación absoluta de mis derechos humanos», expresó en su comunicado.
Asimismo, aseguró que ha recibido tratos crueles como golpes y destrucción de sus pertenencias y documentos donde realizaba las denuncias.
«Pido, solicito e imploro la presencia de los representantes del gobierno colombiano y de alguna organización de derechos humanos para levantar la huelga de hambre» acotó.
Pronunciamiento de defensores de DD HH
Asdrúbal Ortiz, defensor de derechos humanos del Consorcio Justicia Capítulo Occidente, rechazó la situación que, según comentó, viene ocurriendo con Palacios desde el 21 de septiembre.
«La información que manejamos es que las autoridades del CPO lo han maltratado, que psicológicamente está afectado y que además, presenta desnutrición por la mala alimentación» dijo.
«Con esta decisión puede fallecer, esa es la realidad», agregué.