Este martes, las autoridades colombianas verifican información que señala que el jefe disidente de las FARC Seuxis Paucias Hernández Solarte, conocido como Jesús Santrich, murió en un enfrentamiento en Venezuela.
No se trata, sin embargo, del primer caso de delincuentes colombianos que han sido capturados o han muerto en Venezuela.
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Los criminales colombianos que murieron en Venezuela
En enero de 2008 fue hallado en un complejo turístico de Mérida, Venezuela, el cuerpo de Wilber Alirio Varela, alias Jabón, exfeje del cartel del norte del Valle. Jabón fue asesinado con un arma calibre 9 mm, según se informó en su momento.
Jabón inició su vida criminal en los años 80 con los hermanos Rodríguez Orejuela, exjefes del Cartel de Cali, pero luego Varela comenzó a trabajar con Orlando Henao, jefe del Cartel del Norte del Valle.
Sostuvo por mucho tiempo una pelea con Diego León Montoya Sánchez, alias Don Diego. En su momento, el gobierno de Estados Unidos ofrecía 5 millones de dólares por su captura.
De otro lado, en septiembre de 2012 fue capturado en territorio venezolano Daniel «el Loco» Barrera, quien fue detenido en San Cristóbal, estado de Táchira.
El capo fue condenado en EE UU en 2016 a 35 años de prisión y a una multa de 10 millones de dólares. En el juicio en ese país, la Fiscalía sostuvo que Barrera y su organización movió hacia Estados Unidos 720 toneladas de cocaína en menos de 10 años.
Maximiliano Bonilla Orozco, alias Valenciano, fue capturado en noviembre de 2011 en Venezuela. Valenciano fue jefe de la llamada Oficina, tras su captura, fue extraditado a Estados Unidos en donde en 2016 fue condenado a 20 años de cárcel por narcotráfico.
Fue considerado uno de los más sanguinarios narcotraficantes de Colombia y era señalado, además de traficar droga, de liderar una organización de sicarios que coordinaba homicidios especialmente en Cesar, Bolívar, Magdalena y Atlántico.
En el momento de su captura, según detalló entonces el ministro de Interior venezolano, Bonilla no llevaba documentación alguna pero tenía en su poder una cantidad de bolívares equivalentes para la fecha a aproximadamente 180.000 dólares.
En febrero de 2012 Héctor Germán Buitrago Parada, alias Martín Llanos, y su hermano fueron capturados en el estado Anzoátegui. Llanos era considerado el último gran jefe paramilitar que quedaba en libertad, era el jefe de las Autodefensas del Casanare.
Buitrago estaba huyendo desde 2004, tras perder la guerra a muerte que libró contra Miguel Arroyave, alias Arcángel, jefe del bloque Centauros de las AUC, que quería apoderarse del control del narcotráfico en Meta y Casanare.
Nació el 23 de enero de 1968 en Monterrey, Casanare. Allí, a finales de los 80, su padre armó a un grupo de familias ganaderas para combatir la extorsión de las FARC y ahí comenzó la historia de las Autodefensas Campesinas de Casanare (ACC).
En 2014, Llanos fue condenado por el homicidio del exgobernador de Casanare Emiro Sossa Pacheco. En 2013 ya había recibido una condena de 28 años por desaparición forzada.
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