Después de dos años de suspensión por la pandemia, los margariteños celebraron nuevamente el primero de septiembre la tradicional bajada de la Virgen del Valle. Miles de personas se concentraron en El Valle del Espíritu Santo para manifestar su fe y devoción por la conocida como la Patrona de Oriente.
Luego de la santa misa pontifical realizada en la explanada de la Basílica Menor de Nuestra Señora del Valle, oficiada por el obispo de Nueva Esparta, monseñor Fernando Castro Aguayo, la Virgen inició el tradicional descenso desde su camarín.
Con mucho cuidado, el equipo de la iglesia trasladó la imagen de la patrona de los marineros a las puertas de la basílica, donde los miles de asistentes la recibieron entre aplausos y oraciones.
La imagen fue colocada luego donde permanecerá en la basílica hasta el 8 de septiembre, cuando se celebrarán los 111 años de coronación canónica y el centenario de la proclamación de la Virgen del Valle como patrona del oriente venezolano.
En la homilía, el obispo de Margarita dijo que la advocación de la Virgen de El Valle es de las primeras evangelizadoras desde hace cinco siglos. «Es el caminar de la Iglesia en Margarita y el mundo», manifestó.
La misa fue musicalizada por el Coro Polifónico, la Orquesta Sinfónica y el Proyecto Alma Llanera de Cumaná, con la participación de músicos margariteños.
Algo que esperan los fieles todos los años con ansias es ver el vestido que lucirá la Virgen. Este año la prenda fue donada por una paciente en recuperación de cáncer, y el diseño es del valenciano Franco Montoro.
El vestido está inspirado en la proyección que representa la madre santísima compasiva, cubriendo con su manto sagrado a todos sus hijos esparcidos por el mundo, dijo su camarera Cecilia Mata al diario El Sol de Margarita.
El llamado a los fieles es a disfrutar de las fiestas con la mayor civilidad posible y respetando las medidas de bioseguridad.
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«Afortunadamente podemos retomar actividades masivas, esta vez la protagonista es la Virgencita del Valle. Ella se merece un ambiente de armonía y cordialidad», manifestó el secretario de gobierno, Vaché Rodríguez.
Para el 8 de septiembre se espera un gran despliegue de las autoridades regionales, eclesiásticas y militares con el fin de resguardar a los miles de feligreses que se espera que asistan a la celebración del Día de la Virgen del Valle y la tradicional procesión.
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