Leopoldo López, fundador del partido Voluntad Popular, informó este lunes que presentará una querella criminal por difamación en contra de Humberto Calderón Berti, exembajador de Venezuela en Colombia designado por la Asamblea Nacional electa en 2015.
“He tomado la decisión de procesar con una querella criminal por calumnias en contra del señor Calderón aquí en España, donde reside y donde yo resido también; y estoy haciendo esto porque no tengo absolutamente nada que esconder y le permitirá a él una oportunidad de presentar pruebas”, manifestó López en una entrevista con el periodista César Miguel Rondón.
“Estoy seguro de que no hay pruebas en mi contra y es una manera de dejar muy claro ante la justicia a la que puedo acudir en estos momentos que tanto yo como otras personas hemos sido víctimas de calumnias y de ataques infundados por parte del señor Calderón Berti”, agregó el dirigente opositor.
“Leopoldo López es el gran responsable”
Calderón Berti afirmó el 30 de septiembre, también en conversación con Rondón, que López es el responsable de lo que ha ocurrido con la empresa Monómeros, la filial en Colombia de la estatal Pequiven.
“No hay que darle muchas vueltas. El gran responsable de todo lo que ha ocurrido en Monómeros es Leopoldo López, que politiza exageradamente, con un sectarismo impresionante. Politiza todo lo que le ponen en la mano”, expresó el experto petrolero.
Dijo el exembajador que por Monómeros “desfilaron” decenas de dirigentes políticos de la oposición pidiendo favores y pretendiendo hacer negocios con la empresa, actualmente sometida al máximo grado de supervisión por parte de la Superintendencia de Sociedades de Colombia.
“Asistí a una reunión a la que me invitaron porque se celebraba en la oficina donde funcionaba la embajada, y ¿cuál será mi sorpresa? Que el que estaba dirigiendo la reunión era Manuel Rosales, que ni siquiera era diputado. Y los miembros de la Comisión de Energía y Minas de la Asamblea Nacional de la oposición le hacían señalamientos absolutamente desconsiderados a los miembros de la junta directiva que se había nombrado. Incluso preguntándole a uno de los directivos por qué no le había dado un contrato a un amigo. En señal de protesta me paré y me fui”, aseguró Calderón Berti.
Monómeros, la “piñata” de la oposición
El expresidente de Petróleos de Venezuela afirmó que los dirigentes políticos tomaron Monómeros como una “piñata” y advirtió que se corre el riesgo de perderla. Agregó que la Superintendencia de Sociedades tuvo que intervenir para evitar que ocurriera una debacle y protegerla tanto del gobierno de Nicolás Maduro como de la oposición que lidera Juan Guaidó.
“Cometieron un gravísimo error, y los mismos que estaban en Monómeros son gente vinculada a lo que estaba ocurriendo en Cúcuta, que yo denuncié en su debido momento. Y no sé qué pasó, pero empezaron a manipular para que la Fiscalía no se pronunciara. Cuando llegué a Colombia empecé a oír rumores de lo que ocurría en Cúcuta, e hice lo que mi conciencia y mi responsabilidad de funcionario me obligaba, que era hacer una denuncia. ¿Dónde? En Colombia porque allá ocurrieron los hechos. Ahora resulta que gente que estaba en eso aparece ahora en lo de Monómeros también”, manifestó.
“Eso fue lo que ocurrió, el mal manejo, la intromisión política. Lo que lamento profundamente es que cuando hice los señalamientos de lo que ocurrió en Cúcuta, y en el momento en el que hice los señalamientos de lo que estaba ocurriendo en Monómeros, en lugar de alinearse conmigo, que era en defensa de los intereses de la población venezolana, me declararon una guerra dirigida por Leopoldo López. Porque resulta que quienes estaban incursos en los delitos de Cúcuta eran amigotes de él y de Guaidó. Y son los mismos que estuvieron en la etapa final de Monómeros”, agregó.
“Muy irresponsable”
Leopoldo López calificó de irresponsables esas afirmaciones del expresidente de Petróleos de Venezuela porque desde que se desempeñaba como embajador en Bogotá ha hecho acusaciones que, según el dirigente de Voluntad Popular, no tienen fundamentos.
Recordó que en 2019 el exembajador hizo declaraciones que involucraban a representantes del llamado gobierno interino, que lidera Juan Guaidó. Calderón Berti denunció en ese entonces que los funcionarios Rosana Barrera y Kevin Rojas habían robado recursos de la ayuda humanitaria que Estados Unidos destinó a Venezuela.
“Esa fue una declaración explosiva. De hecho fue el primer escándalo que tuvo el gobierno interino y esas fueron acusaciones que dio el señor Calderón sin ningún fundamento, tan es así que presentó ante la Fiscalía de Colombia una acusación que fue desestimada, pero tuvo consecuencias. Le desgració la vida a Rosana Barrera y Kevin Rojas, les abrieron un caso en la Fiscalía venezolana, les allanaron sus casas, tuvieron que salir de Venezuela y en Colombia los señalaron por esto que había hecho Calderón”, manifestó.
“Me parece muy lamentable que esto se haya convertido en una práctica del señor Calderón. Las acusaciones que ha hecho sobre Monómeros han sido gravísimas, en las que también expone a personas con nombre y apellido ante el paredón de las acusaciones y precisamente porque son infundadas son mentiras y tienen consecuencias”, añadió.
Negociaciones, el “camino” a presidenciales
López dijo que la negociación en México, actualmente suspendida por decisión del gobierno de Nicolás Maduro luego de la extradición a Estados Unidos de Alex Saab, es el camino que puede permitir la solución de la crisis política en Venezuela a través de unas elecciones presidenciales libres, justas y verificables.
El opositor afirmó, sin embargo, que los comicios de alcaldes y gobernadores del 21 de noviembre no cumplen esas condiciones y que son prácticamente nulos los cambios que se han dado con respecto a los anteriores en el país.
“Como lo hemos planteado, es una oportunidad para poder luchar en contra de la dictadura. En Venezuela se han cerrado los espacios para la lucha política y este es un espacio que ha permitido la organización, la movilización, la articulación de distintas fuerzas políticas. Las expectativas las debemos tener muy moderadas para no caer en el error en el que caímos en el año 2017; se habló que se iba a arrasar en unas elecciones y al final del día la dictadura se robó esas elecciones, y podría hacerlo nuevamente”, dijo.
López manifestó que “despachar alegremente” la legitimidad de la presidencia encargada de Juan Guaidó tendría serias consecuencias. Las primeras de ellas, señaló, es la debilitación de la negociación en México y le daría acceso al gobierno de Maduro a fondos que alcanzan los 10.000 millones de dólares.
“Creo que los venezolanos todos estamos claros de que eso sería dinero destinado al despilfarro, a la corrupción, y sería el primer interés de la dictadura”, enfatizó.
“Críticas inconvenientes”
El opositor afirmó que las críticas que Julio Borges y el partido Primero Justicia por el manejo de Monómeros fueron inconvenientes.
“Julio presentó las diferencias con Juan Guaidó en comunicados que hicieron mucho daño al proceso de México, incluso en litigios que están todavía en curso. Creo que si tenemos como meta enfrentar a la dictadura y derrotar a la dictadura, debemos hacer lo posible por transitar juntos este camino que es muy complejo y que la dictadura tiene como estrategia dividirnos a los venezolanos y particularmente a los sectores democráticos”, dijo.
Agregó que desconoce las motivaciones de Borges y la tolda política.
“Veo con mucha sospecha cómo algunos sectores de la democracia coinciden con la dictadura de Maduro en buscar descabezar la legitimidad de Juan Guaidó, creo que con esto tenemos que ser muy serios y cautelosos con las implicaciones que esto tiene”, expresó.