Las recientes sanciones de la administración de Joe Biden a las exportaciones de oro en Nicaragua buscan sacudir las estructuras con las que los aliados regímenes de Daniel Ortega y Nicolás Maduro, triangulan el oro venezolano ilegalmente.
Estados Unidos busca bloquear el financiamiento que genera el oro que exporta Nicaragua y para eso sancionó a la gubernamental Dirección General de Minas. La decisión estadounidense incluye una orden ejecutiva firmada por el presidente para sancionar a otras personas vinculadas al sector áurico de Nicaragua. Igualmente se prohíben las inversiones estadounidenses en otros sectores de la economía nicaragüense.
Oro de Nicaragua
Con el sospechoso aumento en las exportaciones de oro de Nicaragua desde 2018 que las llevaron a convertirse en el principal producto de exportación de ese país en 2020, el régimen de Ortega se embolsilla cerca de 1.000 millones de dólares anuales por exportaciones de oro.
Según Douglas Farah, especialista en crimen internacional y seguridad, detrás existe una estructura creada para burlar las sanciones estadounidenses contra el gobierno de Maduro.
“Sale mucho oro ilegal de Venezuela, lo mandan a Nicaragua y lo venden como oro nicaragüense ante el mercado transnacional. Hay mucha relación. Venezuela no tiene el dinero que tenía antes, ya no puede regalar tanto. Tampoco está lavando tanto dinero porque el Estado ya no tiene tanto dinero para lavar”, dijo al Diario de las Américas en abril.
Oscar René Vargas, sociólogo y economista nicaragüense afirmó: “La sanción va indirectamente contra los venezolanos, porque se sabe que Venezuela triangula oro a través de Nicaragua porque tiene bloqueadas las ventas”.
Y agrega: “Las exportaciones se duplicaron sin que haya habido mayores inversiones en la rama aurífera. Ese incremento se da, no por compañías extranjeras, sino por esta triangulación entre los Ortegas. Por eso las sanciones”.
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