Las autoridades venezolanas localizaron los cadáveres de ocho indígenas waraos, entre ellos varios niños, en la desembocadura del río Orinoco e investigan las causas de la muerte, denunció este martes la activista Rocío San Miguel que citó como fuente a la asociación civil Kapé Kapé.

«Ocho cadáveres de indígenas venezolanos fueron localizados flotando en el río Orinoco. Entre los fallecidos hay hombres, mujeres y niños de la comunidad warao. Se presumen eran migrantes con destino a Guyana según la ONG Kapé Kapé», escribió San Miguel en Twitter.

La asociación civil explicó en un comunicado publicado días atrás y que trascendió hoy que una comisión mixta de seguridad, coordinada y conformada por el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalística y la Fuerza Armada Nacional Bolivariana «encabezan las averiguaciones del hallazgo de ocho waraos fallecidos de un presunto naufragio en los primeros días de febrero».

En la misma también participan el Ministerio Público, la Defensoría del Pueblo y el Tribunal de Justicia.

«La comisión que investiga las causas de los fallecimientos regresó el pasado lunes 7 de febrero de la zona, y aún se desconoce el resultado preliminar de las investigaciones, aunque el naufragio y muerte por inmersión son las hipótesis que cobran mayor fuerza por las características que presentan los cadáveres hallados», según Kapé Kapé.

Los habitantes del sector, según la asociación civil, presumen que son migrantes waraos «que buscaban cruzar la frontera bordeando las costas y la desembocadura del Orinoco».

Los cuerpos fueron hallados en el sector conocido como isla Morro o Bakamuju, a una hora de Curiapo, en la parroquia Curiapo del municipio Antonio Diaz, que forma parte del amazónico estado Delta Amacuro.


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