La crisis en las universidades autónomas sigue ganando espacios, según se desprende de la denuncia que publicó este viernes la organización no gubernamental Aula Abierta sobre el estado de la biblioteca de la Universidad de Oriente.
Ignacio Díaz, secretario general de Sintraudo, denunció que esos espacios están inoperativos debido a la contaminación por hongos, que ponen en riesgo los centenares de libros que allí se encuentran.
«Además, los trabajadores no pueden ingresar sin correr el riesgo de contaminarse con los hongos que allí proliferan», dijo Díaz.
De igual manera, indicó que tampoco hay electricidad debido a hurtos de material eléctrico.
«Se robaron la brequera y se llevaron todo el cableado», señaló.
A todo ello se une que el sótano de la biblioteca está repleto de agua por los robos a las cañerías, lo que también compromete la infraestructura del lugar.
Robos en las universidades
La organización Aula Abierta informó el miércoles que en los últimos 2 años ha computado al menos 371 episodios de arremetida del hampa contra universidades en Venezuela, incluida la UCV, la principal del país y patrimonio mundial de la humanidad.
«Venezuela acumula 371 episodios de la arremetida del hampa contra las universidades desde el inicio del decreto de pandemia, el 13 de marzo de 2020, hasta mediados de marzo», dijo la ONG en un comunicado de prensa.
En 2022, Aula Abierta registró 24 incidentes de inseguridad en 6 universidades del país, de los cuales 11 fueron en la Universidad de los Andes (ULA), 8 en la Universidad de Oriente (UDO), 2 en la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA), y 1 tanto en la Universidad del Zulia (LUZ), en la Universidad Central de Venezuela (UCV), como en la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (UPEL).
Denuncian contaminación en los espacios de la biblioteca de Universidad de Oriente (UDO) en Anzoátegui. #DerechosUniversitarios pic.twitter.com/fmxueb6Owm
— Aula Abierta (@AulaAbiertaVE) April 1, 2022
Ignacio Díaz, Secretario general de Sintraudo, comenta que los espacios de la biblioteca están inoperativos y contaminados. Los trabajadores no pueden ingresar sin correr el riesgo de contaminarse con los hongos que allí proliferan. #DerechosUniversitarios pic.twitter.com/tQSQQxETZO
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Tampoco hay electricidad, pues se robaron la brequera y se llevaron todo el cableado. Además, el sótano de la biblioteca está repleto de agua por los robos a las cañerías, lo que también compromete la infraestructura del lugar. #DerechosUniversitarios pic.twitter.com/7F2buKcvQU
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