El Ministerio Público designó el martes al fiscal 9 nacional para investigar el hallazgo de una osamenta en San Bernardino que posiblemente sea de la periodista Kalinina Ortega, desaparecida desde octubre de 2016.

Tarek William Saab, fiscal general, explicó que se trata de 79 restos óseos encontrados detrás de una vivienda en San Bernardino.

“Se está a la espera de los resultados periciales respectivos para determinar que dichos restos sean efectivamente de la comunicadora social”, subrayó Saab en su cuenta de Twitter.

Una versión apunta, según el Diario VEA, que el paradero de Kalinina Ortega se desconoce desde que salió de su casa para cobrar su pensión. Sin embargo, el día de su desaparición la comunicadora fue a hacer su diligencia sin cédula de identidad, pues la policía encontró en su casa tanto su documento como su bolso.

Otro medio pro gobierno, La Tabla, recordó que Ortega fue víctima de “bullying vecinal” por un conflicto de uso urbano. “Hoy una revisión permite ubicar documentos que confirman el odio/persecución a la periodista por ser ‘comunista”, dice el portal en un hilo de Twitter.

La Tabla indicó que la comunicadora abrió en 2013 su cuenta de Twitter y aprovechó para decirle a la exfiscal Luisa Ortega Díaz que estaba perdiendo su casa por culpa de delincuentes, a pesar de que su caso ya estaba en manos de la Fiscalía 69.

Mientras que el periodista Manuel Isidro Molina denunció en su blog que los acosadores de Ortega contaban con “protección de supuestos funcionarios gubernamentales, policiales y judiciales”.

“Una rara mezcla de abusos de abogados, santeros y personas codiciosas y desconsideradas que la agreden constantemente, pretendiendo echarla de su casa y de la urbanización”, dijo.

Kalinina Ortega nació el 23 de marzo de 1940 en Caripito y estudió Periodismo en la Universidad Central de Venezuela. Trabajó en el diario Últimas Noticias y en la Radio Aeropuerto. En el diario El Nacional, donde tenía la columna “Cátedra en la calle”, se destacó en la fuente educativa.

Su hermana Karelia la describió de este modo en declaraciones al Diario VEA: “Fue una luchadora, ayudó mucho a Chávez, se volvió loca con Chávez. Solo Dios sabe dónde estará, qué le pasó, no hay investigación, no ha habido nada (…) Mi hermana siempre fue comunista, guerrillera, luchó contra Rómulo Betancourt, contra los gobiernos adecos”.


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