InSight Crime

InSight Crime afirma que Venezuela es un Estado híbrido donde cogobierna con grupos criminales. Así lo publicaron en su portal web.

Afirman que la línea entre el gobierno y el crimen se ha desdibujado. En algunas zonas populares el gobierno ya cogobierna con grupos al margen de la ley.

Trabajan mano a mano con ellos para mantener el control social sobre la población y contrarrestar las amenazas políticas, sociales y económicas”, afirma.

La organización asegura que esto se remota a, al menos, 20 años atrás. “Cuando el entonces presidente Hugo Chávez intentaba utilizar todos los medios necesarios para continuar en el poder”.

Desde entonces, en el país han surgido nuevas generaciones de grupos armados híbridos. Estos, sistemáticamente, se coordinan y cooperan con elementos del Estado, afirma el texto.

Criminales mezclados con instituciones y autoridades

InSight Crime afirma que, en materia de seguridad, los objetivos e intereses del gobierno y los grupos ilegales se han mezclado.

“Se fundieron en una sola pieza. Han llegado, incluso, a incorporar personas y recursos y adelantar acciones y operaciones en conjunto”.

«Algunos de ellos han establecido facciones políticas y ubicado personas en cargos públicos a nivel local, regional y nacional”, apuntó la organización.

Uniformes y acciones en conjunto

En un video mostrado por los investigadores, se observa imágenes de ciudadanos portando uniformes.

Todos con siglas del Cupaz (Cuadrillas de Paz) y de la Corriente Revolucionaria Bolívar y Zamora (Crbz). Todos colectivos progobierno.

«En Venezuela, los grupos criminales cogobiernan con el Estado, trabajan de manera mancomunada en tareas gubernamentales. Como la provisión de seguridad y servicios públicos en los territorios”, señala.

InSight Crime exterioriza además que en el país “los recursos estratégicos y cadenas enteras de suministro son controlados por el Estado y redes criminales”.

“Todo esto bajo un sistema de economías híbridas, como los mercados negros, el contrabando de combustible y chatarra y (…) el comercio de oro”.


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