El marine venezolano-estadounidense que buscó el sueño americano
David Mantilla, marine venezolano-estadounidense. Foto: Cortesía

David Mantilla es un venezolano que nació en Caracas y vivió gran parte de su niñez en una de las parroquias más populares del oeste de la ciudad, Los Magallanes de Catia.

Debido a la crisis socioeconómica que vive Venezuela desde hace años, Mantilla asumió a los 19 años de edad uno de los retos más grandes de su vida: buscar en otras tierras un mejor futuro.

Decidió viajar a Estados Unidos en busca del sueño americano. Luego de migrar a ese país con una visa de turista y pasar por muchos empleos, este luchador logró encontrar un oficio en el Ejército norteamericano.

Mantilla pertenece actualmente a las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, y gracias a su perseverancia ha hecho realidad sus sueños.

«Soñaba grande, pero nunca imaginé que sería por medio de la Marina de Estados Unidos que lo lograría. Siendo un migrante llegué haciendo muchas cosas, trabajé en la construcción, lavé platos, palee nieve y arreglé piscinas; es decir, desempeñé los trabajos de cualquier otro migrante cuando llega a Estados Unidos», detalló en una entrevista con TVV noticias.

«Pero cuando llegué a la Marina de Estados Unidos aprendí muchas cosas. La Marina me ha dado muchas oportunidades», agregó.

En marzo de 2021, Mantilla culminó su carrera universitaria y ahora comenzará una maestría en Seguridad Cibernética.

«De ese saco de sueños que yo traje a Estados Unidos, la Marina fue un paso importante para yo ir alcanzando todos esos sueños y los que aún faltan», dijo.

El venezolano-estadounidense destacó que su familia en Los Magallanes de Catia son personas muy unidas y trabajadoras. «A ellos les debo también lo que soy», expresó.

Y añadió: «Dentro de un barrio hay mucha gente buena, mucha gente respetuosa, humilde y que quieren echar para adelante; siempre pensando en el prójimo y que siempre querrán lo mejor para sus hijos».

David Mantilla, que está casado, aseguró que algún día le gustaría traer a sus hijos a Venezuela y mostrarles cómo fue su vida en el país que lo vio crecer.

Por último, envió un mensaje a los jóvenes venezolanos: «Nunca se rindan; la constancia, la perseverancia y creer en ti mismo te ayudará a pasar cualquier obstáculo».


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