mina en Bolívar
Foto: Archivo

Al menos 16 muertos y 11 heridos ocasionó el colapso de una mina de oro en el estado Bolívar, donde especialistas denuncian un «ecocidio» por la proliferación de la minería ilegal.

La tragedia en la mina

El desastre ocurrió el martes en la mina Bulla Loca, a siete horas de navegación por el río de La Paragua, la población más cercana, adonde han llevado los cuerpos hallados desde que empezaron al día siguiente las operaciones de rescate.

Un video divulgado por las autoridades muestra a decenas de mineros que trabajaban en la cantera a cielo abierto y que salen disparados cuando un derrumbe les cae encima, tragándose a varios.

«Se abrió un hueco y se desplomó a una profundidad de 30 metros por 100 metros de largo», dijo Nicolás Maduro el miércoles en la noche.

La ONG SOS Orinoco, que denuncia un ecocidio en la zona, registró 54 muertos en 17 accidentes mineros entre 2017 y 2022 en los estados Bolívar y Amazonas. Su fuente, a falta de datos oficiales, son reportes de la prensa local.

En diciembre, 12 personas murieron tras el colapso de una mina en la comunidad indígena de Ikabarú, en Bolívar, donde días antes había ocurrido un colapso parcial sin fallecidos.

«Son espacios de extracción que carecen de la ingeniería necesaria. Se explotan bajo procesos artesanales» y por ello «aumentan las probabilidades de derrumbes e inundaciones», dijo a la AFP Eumelis Moya, coordinadora del Centro de Derechos Humanos de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) en la región.

Los mineros, agregan, son sometidos a prácticas «análogas a la esclavitud moderna».

«Esta es una tragedia, pero detrás de ella vendrán más porque ya están antecedidas por otras», lamenta el exdiputado opositor Américo De Grazia, quien ha denunciado por años casos de minería ilegal.

El equilibrio

El viceministro de Seguridad Ciudadana, Carlos Pérez Ampueda, actualizó el número de fallecidos a 16 en un último balance oficial.

El número de víctimas fue revisado a la baja por el gobierno nacional, luego de un balance provisional de una autoridad local que reportaba 25 fallecidos. Dirigentes como De Grazia sostienen que el número podría ser mayor.

Los cadáveres fueron llegando a La Paragua en barcas que enfrentaron problemas para acceder a combustible, crónicamente escaso en la región.

Un equipo élite de rescate de Protección Civil viajó desde Caracas para atender la emergencia. Maduro dijo que dos helicópteros estaban puestos al servicio de las tareas de salvamento.

El modelo

Maduro creó en 2016 el Arco Minero del Orinoco, área de casi 112.000 km2 con reservas de oro, diamante, hierro, bauxita, cobre y coltán para su explotación.

El modelo, que buscaba complementar la menguada renta del petróleo, abrió la puerta para operaciones ilegales que se han expandido por todo el sur de Venezuela, sostiene Cristina Burelli, de SOS Orinoco.

«Lo hemos denunciado sistemáticamente desde 2018», dijo Burelli a la AFP. «La respuesta ha sido negarlo, primero, ya a partir de 2022 empezaron las operaciones militares».

La Fuerza Armada informó que en el último año fueron desalojados cerca de 14.000 mineros ilegales del Parque Nacional Yapacana, en Amazonas, pero Burelli califica esos despliegues de «show mediático».

El último reporte de SOS Orinoco considera que la minería ilegal ha repuntado.

«No se ha logrado refrenar; al contrario, se ha agudizado», coincide Moya.

Todo ello con un alto impacto ambiental.

«El envenenamiento de las aguas con cianuro y con mercurio afecta no solamente a las poblaciones indígenas», sino también a «ríos que alimentan presas y tomas de agua en las ciudades» de la región, subraya De Grazia.

Activistas denuncian que guerrilleros colombianos y bandas criminales han tomado las áreas mineras y en muchos casos acusan a militares de «complicidad».

«Son territorios ocupados por el ELN, por disidentes de las FARC, por los pranes (jefes criminales) que hacen suya la zona y establecieron un mecanismo de terror», denuncia el exlegislador.


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