docentes, El Nacional
La presidenta de la organización Formación de Dirigentes Sindicales del sector educativo (Fordisi), Gricelda Sánchez. Foto: Captura de video

Docentes y trabajadores del sector educativo protestaron este viernes frente a la sede de la Unidad Médico Odontológica (UMO) del Ipasme Sagrado Corazón de Jesús, en La Hoyada, una de las pocas que se mantiene abierta, para exigir la reapertura de esos centros de salud en Venezuela.

La presidenta de la organización Formación de Dirigentes Sindicales del sector educativo (Fordisi), Gricelda Sánchez, aseguró que 67 sedes están cerradas.

«Estamos exigiendo la apertura de las 67 unidades del Ipasme en todo el país porque hemos visto cómo se han muerto docentes por no tener medicinas, por no tener atención», manifestó.

En tanto, una maestra del estado Sucre, que se trasladó a la capital directamente al Ipasme, solicitó  apoyo con urgencia para una cirugía gineco-obstetra.

«Estoy saltando de hospital en hospital. Nosotros los educadores del estado Sucre no tenemos HCM, y el hospital de Cariaco no tiene nada. Por eso nos tenemos que trasladar tan lejos para pasar penurias aquí en la ciudad para ver quién nos brinda atención», dijo.

Sánchez denunció: «Se nos están muriendo los profesores porque no tienen cómo ir a curarse la enfermedad que tengan. Nosotros (los maestros) seguimos pagando Ipasme, dónde está ese dinero».

Sector educativo: más de 1.000 protestas en 4 años

Recientemente, el Instituto de Altos Estudios Sindicales (Inaesin) alertó que más de 20% de los conflictos laborales registrados en los últimos 4 años en Venezuela han sido protagonizados por trabajadores del sector educación, lo cual supuso «más de 1.000 protestas realizadas por los maestros».

La organización aseveró que desde 2018 hasta ahora el sector educación se ha mantenido, junto con el sector salud, como uno de los más participativos en la reivindicación de sus derechos en Venezuela.

El Inaesin refirió que el reclamo principal del gremio docente es el bajo salario que devengan, pero que a ello se suman las carencias en el ejercicio de su labor.

«También han reclamado por el abandono de los planteles educativos, que se encuentran en terribles condiciones de deterioro, así como por los comedores escolares que no funcionan», apuntó el instituto.

 


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