Diego Arria, exembajador ante la ONU y exgobernador del Distrito Federal, aseguró que la “Asamblea Nacional ha socavado el papel de Guaidó desde el primer día cuando, en violación de la Constitución, se negó a jurarlo como presidente interino de Venezuela”.
“Los cuatro partidos políticos que controlan la Asamblea no querían un Guaidó independiente, y procedieron a crear un gobierno parlamentario con Guaidó a la cabeza, pero bajo su mando absoluto. Este procedimiento ilegal les ha permitido ser los verdaderos encargados del gobierno interino, usándolo como agencia de colocación de sus miembros y nombrándolos en directorios de empresas estatales como Citgo, Monómeros y Pdvsa, y como embajadores y asesores, conservando a Guaidó como vocero, solo porque sin él dejarían de existir”, dijo Arria para The Dialogue, un medio especializado en análisis políticos de la crisis del hemisferio occidental.
El exembajador continuó diciendo que un pequeño número de representantes se niegan a separar los poderes legislativo y ejecutivo, manteniendo a Guaidó como presidente de ambos. “El 3 de enero continuaron minimizando su papel, subordinándolo aún más a ellos. Guaidó no impugnó esta decisión, siguiendo la línea de su propio partido político, a pesar de que había prometido estar libre de subordinación política a Leopoldo López y a su partido, Voluntad Popular”.
A su juicio, el gobierno interino no es necesario para proteger los activos de Venezuela afuera del país pues “el gobierno de los Estados Unidos protegerá a los que están en su jurisdicción y el Reino Unido protegerá el oro depositado en el Banco de Inglaterra. Ambos son confiables y transparentes, en marcado contraste con el gobierno interino de Venezuela”.
La exembajadora de Venezuela ante Reino Unido, Vanessa Neumann, comparte una opinión similar a la de Arría pues acusó a Julio Borges, excomisionado para las Relaciones Internacionales designado por la Asamblea Nacional electa en 2015, de conspirar contra Juan Guaidó por ser de partidos distintos.
“Había enormes preocupaciones por parte del gobierno de Estados Unidos y el gobierno británico de que los partidos políticos del G4 cambiaran a Guaidó por otra persona. De hecho, el esfuerzo para hacerlo fue dirigido por el propio ministro de Relaciones Exteriores de Guaidó, Julio Borges, quien durante mucho tiempo ha socavado los esfuerzos de Guaidó, su jefe, porque provienen de partidos rivales”, afirmó.
Asimismo, detalló que lo ocurrido se debió a que el presidente interino “Está demasiado en deuda con la coalición de partidos que se reparte un pastel de poder falso entre ellos antes de tener el poder real del control territorial e institucional; no está ligado al poder real, sino al acceso a recursos de financiamiento, desde Citgo y bonos hasta ayuda internacional pro-democracia”.
Para la exfuncionaria, es de gran importancia una depuración de los agentes cercanos al político en cuestión. “Si bien es necesario y correcto que se renueve el mandato de Guaidó, todos los demás deben ser eliminados, y un nuevo banco de personas serias, limpias y representativas debe sentarse y considerarse seriamente para recibir el respaldo de los venezolanos y la comunidad internacional”.
Con información de The Dialogue.