Madres y padres denunciaron la muerte de al menos 30 recién nacidos en el Hospital Luis Ortega de Porlamar, en la isla de Margarita, estado Nueva Esparta. Eso habría ocurrido en menos de dos semanas.
Wilmer Reyes, padre de una bebé, aseguró que tiene 15 días en ese centro asistencial porque 12 horas después de que su hija nació bien, le informaron que tenía una infección respiratoria. Luego de dos días, la vio convulsionar y vomitar sangre.
“Se ponía morada y los médicos decían que era por frío. Se mueren niños a cada rato. Uno reclama, lo sacan. Mi niña está bien, tiene todos sus exámenes buenos y vienen de repente y me dicen que mi niña tiene meningitis. El domingo me hicieron correr buscando termómetro, al final vino un especialista y me dijo que mi niña no tenía nada”, expresó.
El padre, que calificó la situación de un desastre, denunció que las autoridades del hospital no han dado respuestas. “Se corren rumores de que el aparato para esterilizar los aparatos está dañada, usan vinagre. A los niños aquí los están sacrificando prácticamente”, expresó Reyes.
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José Antonio Narváez, presidente del Colegio de Médicos de Nueva Esparta, dijo que por las condiciones del hospital mueren bebés que son intervenidos por cirugía pediátrica y los que nacen prematuros, reseñó Noticias Todos Ahora. Señaló que no hay aire acondicionado y que el aumento de la temperatura hace que las infecciones neonatales, operatorias y posoperatorias sean mayores.
“La morbimortalidad ha ido aumentando en pediatría, medicina general y obstetricia. Esto es insostenible. Los índices superan con creces los límites permitidos por la Organización mundial de la salud”, manifestó.