49 militares venezolanos forman parte de la lista de sanciones internacionales impuestas al régimen de Nicolás Maduro por Estados Unidos, la Unión Europea, Canadá, Suiza, Panamá, Reino Unido y los países que integran el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR).
A estos funcionarios de la FANB se les acusa de mantener vínculos con el narcotráfico, torturar y cometer graves violaciones en contra de los derechos humanos. Las agresiones han tenido tales niveles de violencia que incluso la alta comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, llamó a los militares venezolanos «escuadrón de la muerte».
Los militares sancionados están a cargo del Comando Estratégico Operacional (Ceofanb), de las Regiones Estratégicas de Defensa Integral (REDI) y de las Zonas Operativas en los estados. En la lista también figuran 168 personas y funcionarios vinculados al régimen de Maduro.
Congelación de activos, de bienes y la prohibición de ingresar a esos territorios son algunas de las consecuencias de formar parte de la lista. E incluso 5 de los 49 funcionarios tienen orden de captura desde el 26 de marzo de 2020.
«Las sanciones individuales de la comunidad internacional son mortales para Maduro y su entorno porque los enclavan en Venezuela. Son funcionarios que no pueden tener ningún tipo de actividad u operación fuera del país. Si lo hacen corren el riesgo de que los capturen. Más que afectar la gobernabilidad estas sanciones están afectando la dinámica política y económica del régimen. Se han visto obligados a relacionarse con países o grupos con desprestigio internacional por ser Estados forajidos», resaltó Tulio Álvarez, jefe de la Cátedra de Derecho de la UCV citado por La Prensa de Lara.
El politólogo Radames Graterol explicó a dicho medio que la presión que ejercen estas restricciones no ha logrado su cometido: debilitar al régimen. «En vez de fragmentarse el chavismo se comporta como un bloque monolítico. Siguen en el poder ocupando los cargos más importantes. A medida que ganan las elecciones, aunque sean fraudulentas y con poca participación, el régimen se ha sentido fortalecido. La vía del totalitarismo mantiene el control de todas las instituciones», comentó.
El conflicto con la Unión Europea
Entre las sanciones más recientes se contabilizan las aplicadas por la Unión Europea el pasado 22 de febrero contra 19 funcionarios venezolanos. Nelson Chitty la Roche, abogado y experto en política internacional, sostuvo para el medio que estas sanciones señalan a los responsables de delitos de lesa humanidad en Venezuela.
«Tienen que distinguir a las cabezas visibles del régimen. Las sanciones persiguen obligar a Maduro a permitir elecciones libres y evidencian que el tema de la intervención militar está descartado para los europeos», explicó.
El abogado en derecho internacional Roberto Monagas, por su parte, explicó que aunque Nicolás Maduro está intentando negociaciones con gremios democráticos del país como Fedecámaras, será muy difícil que las sanciones internacionales se levanten. “Tiene que haber un cambio económico y elecciones libres para que la UE levante sus restricciones”, subrayó.