El retorno de ciudadanos colombianos a su país desde Venezuela no se hace de forma voluntaria y planificada, sino que se trata de una vuelta forzada. Así lo indica un informe elaborado por el Centro de Derechos Humanos de la Universidad Católica Andrés Bello (CDH-UCAB).
La mayoría de estas personas había llegado inicialmente al país por el conflicto armado colombiano, la violencia, la falta de oportunidades laborales y la búsqueda de una mejor calidad de vida.
El estudio, titulado (Ni) de aquí (Ni) de allá, señala que hasta finales de 2021 más de 645.000 colombianos habían retornado a su país motivados principalmente por la crisis económica y social en territorio venezolano.
También influyeron las campañas estigmatizantes y acciones específicas del Ejecutivo venezolano, que contempló la expulsión masiva de colombianos en 2015.
El CDH–UCAB documentó que en gran parte de los casos los ciudadanos no lograron recuperar sus bienes o regresar al lugar de donde provienen debido a que persiste el conflicto armado en su país.
“La mayoría de los retornados manifestó que el Estado colombiano no los ha tomado en cuenta como ciudadanos, los ha dejado en el abandono y a la deriva. Aunado con esto se registraron casos de discriminación a ciudadanos binacionales”, apunta el informe.
Muchos de los retornados son nacionales de segunda y tercera generación, así como personas indígenas que habitan en la frontera. «Se han visto forzadas a renunciar a su nacionalidad colombiana y optar por un mecanismo de regularización migratoria diseñado para extranjeros, a fin de no mantenerse en condición irregular en su propio país», destacan los investigadores.
Indígenas del pueblo wayúu, ubicadas del lado venezolano también han tenido que desplazarse al lado colombiano en busca de oportunidades que garanticen la subsistencia, pero se han encontrado con muchas dificultades.
Pese a que son considerados como sujetos de especial protección, muchos indígenas manifestaron que prefieren optar por el Estatuto Temporal de Protección para tener mayor estabilidad en territorio colombiano.
El Plan Regional de Respuesta a Refugiados y Migrantes (RMRP) de la Plataforma R4V proyecta que para 2022 habrá unos 980.000 retornados, de los cuales al menos 645.000 tendrán necesidades por satisfacer.