El anuncio del 1 de mayo hecho por el presidente Nicolás Maduro no fue positivo ni para los trabajadores del país ni para él, al no implicar un aumento real del salario, sino un incremento en las bonificaciones.
Esto se tradujo en “un efecto demoledor” en la imagen electoral del mandatario, según el politólogo Luis Salamanca.
Resaltó que la mayoría de la población vive una situación precaria con un salario que se mantiene igual desde marzo de 2022. Por lo que, al momento de votar el próximo 28 de julio, esa es una realidad que incidirá significativamente en la decisión de los electores.
“Si ya el candidato oficialista estaba mal en la imagen pública y en los sondeos, con esta decisión se termina de redondear que su imagen sea muy criticable, electoralmente hablando”, afirmó
No contar con un ajuste de salario se suma, indica Salamanca, a la lista de motivos que influirán en la elección presidencial, poniendo como prioridad la situación económica y política del país.
“Esta decisión, que pretende presentar el salario como un ingreso indexado, termina por colocar a Maduro como un candidato débil frente al resto de los candidatos y, sobre todo, frente al candidato mayoritario de la oposición”, señaló.
"Salario" es tendencia porque Nicolás Maduro anunció el aumento del "ingreso integral indexado" a 130 dólares.
El salario mínimo siguen siendo 130 bs (equivalentes a 3 dólares o 3 empanadas)
pic.twitter.com/axGqmhNa0T— ¿Por qué es tendencia? (@estendenciavzl) May 1, 2024
Un salario abstencionista desde el oficialismo
Inesperado. Así fue el anuncio de Maduro para el politólogo Daniel Santolo, quien aseguró que se esperaba un ajuste del salario y no de las bonificaciones, porque eso incide de manera directa en la percepción que los venezolanos tienen de la gestión de gobierno.
El especialista indicó que existe un descontento total en las propias bases del oficialismo, que se acentúa con la decisión de no aumentar el sueldo.
“Yo no soy de los que dice que eso va a influir en que las bases del chavismo voten por la oposición. Pero sí podría llamar un alto porcentaje de abstención en el sector que representa el gobierno, pero ya quedará de parte de los venezolanos salir a votar y elegir la mejor opción”, expresó.
Sin embargo, Santolo dijo que el Ejecutivo, aunque tiene una imagen muy negativa, insiste con el argumento de que, por las sanciones, no los dejan trabajar. “Y esto habrá llegado a una gran mayoría de sus bases sociales. Eso lo veremos el día de las elecciones”, dijo.
Trabajadores descontentos con nuevo anuncio
Después de que Maduro anunció que el salario se mantendría en 130 bolívares, que es la base sobre la que se calculan las prestaciones sociales, utilidades, aguinaldos y demás beneficios laborales, los trabajadores comenzaron a sacar sus cuentas y se percataron de que, aunque se aumentó 30 dólares en bonos, “eso no da para mucho y están decepcionados”, alegó el politólogo Leonardo Morales.
Resaltó que esto influirá en la “poca simpatía” que existe con el gobierno de Nicolás Maduro. Al mismo tiempo, calificó el anuncio del ingreso indexado como una oferta engañosa.
Su análisis destaca que en el gobierno se sienten absolutamente convencidos de que ganarán las elecciones, por lo que no necesitan lanzar a la calle grandes sumas de dinero para, digamos, en aumento de salario, “porque a fin de cuentas ellos se imaginan o suponen que van a seguir al frente del Estado”.
Salario indexado: ¿logro o error?
Además de representar un monto insuficiente para cubrir las necesidades básicas de las familias venezolanas, la falta de aumento del salario es un asunto crítico desde el punto de vista político y electoral.
Así lo observó la politóloga María Puerta Riera, para quien el llamado ingreso indexado tiene consecuencias, no solamente en los sectores que lo adversan, sino en su propia base ya mermada, y padeciendo las mismas dificultades del país.
“El oficialismo lo va a vender como un logro del gobierno, pero difícilmente podrá convencer a quienes a diario se enfrentan con la imposibilidad de cubrir necesidades básicas”.