El ex alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, afirmó que Juan Guaidó tiene la vía libre para plantearle al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, la reactivación de la oficina de la DEA en Venezuela, porque es reconocido por el gobierno norteamericano como el mandatario legítimo de Venezuela.
En declaraciones a El Nacional, Ledezma explicó que, a pesar de que la administración madurista tiene el control material de los puertos y aeropuertos, hay otras vías para que la agencia antidrogas pueda operar plenamente en el país.
“Más allá del control material que tienen los funcionarios adscritos a la dictadura, hay muchos mecanismos que pudieran arbitrarse para realizar operaciones contundentes, apoyadas en documentos que reposan en Estados Unidos y Europa que evidencian que Venezuela se ha convertido en el patio trasero de los carteles de la droga de Colombia, Perú, Guatemala, Honduras y México”, afirmó.
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“Eso de que Maduro controla los puertos, aeropuertos y bases militares no es tan cierto. Maduro no controla ni a su propia familia. Desconfía hasta de su propio jefe de la Casa Militar, el que maneja su agenda, el que sabe dónde desayuna y dónde pernocta”, recalcó Ledezma.
Recordó que fue el propio jefe de inteligencia de Nicolás Maduro, Manuel Ricardo Cristopher Figuera, quien acusó a Vladimir Padrino López y a Maikel Moreno de conspirar en su contra junto con quienes llamó “los filantropos de la transición”, es decir, los personajes que supuestamente financiarían la operación del pasado 30 de abril.
Intervención humanitaria
Ledezma asegura que Juan Guaidó tiene plenas facultades para solicitarle a la Asamblea Nacional la aplicación del artículo 187 de la Constitución.
“El presidente puede solicitar a la AN la invocación de una fuerza internacional especializada que nos ayude a doblegar las mafias que han secuestrado a Venezuela. Se aplica cuando un régimen por acción o por omisión no está en capacidad de garantizar las necesidades de salud, alimentación y seguridad de los venezolanos”, subrayó.
Añadió que es posible articular una coalición especializada, donde también participen los militares en rebelión. Pero aclaró: “No estamos diciendo que eso sea de aplicación inmediata, sino que la AN habilite a Guaidó para que persuada a los gobiernos amigos y que entiendan la justificación de la intervención humanitaria. Es un apoyo a las fuerzas internas, porque aquí también debemos actuar”.