El cierre del Mercado Las Pulgas, foco importante del coronavirus en Maracaibo, ha traído consecuencias para los residentes de las zonas vecinas ya que los comerciantes informales que laboran en ese recinto se han movilizado a otras zonas residenciales de Maracaibo: Sabaneta y Pomona.
Una nota publicada por Portal de Noticias, escrita por José Manuel Sánchez, señala que a pesar de los esfuerzos de la Policía Nacional Bolivariana, los buhoneros aún buscan el pan de cada día en las adyacencias de lo que fue una vez su sitio de trabajo y por el cual transitaban, según cifras oficiales, unas 30.000 personas.
En Sabaneta estos vendedores alternativos están ubicados entre Puente España y la estación del Metro de Maracaibo Urdaneta. En Pomona hacen sus negocios entre la estación de servicio conocida como La bomba de Chucho hasta los previos del antiguo cine Lido.
En la vía al aeropuerto la mayor concentración de comerciantes está en la intersección de la avenida 19 con calle 100, en el sector Arismendi, lo que provoca lentitud en el tránsito de una arteria vial que es utilizada por los conductores como un desahogo de la Circunvalación 1.
En Pomona es peor la situación debido al posicionamiento de los vendedores y carretilleros que se confunden con la cola para despachar combustible en la gasolinera anteriormente mencionada. Ocasiona molestia a los residentes del sector y a los comerciantes formales quienes ven tomadas sus estacionamientos en detrimento de la venta informal.
Perjudicados por el cierre del Mercado Las Pulgas
En los residentes de Pomona no faltan las quejas, pero no son altisonantes por temor a las represalias que se dicen toman estos comerciantes hacia los vecinos que manifiestan sus quejas.
Una de las habitantes del sector explicó a que desde las 7:00 am llegan a colocar sus mesas y toman, no solo la acera, sino las rejas para armar sus tarantines y trancan el paso de los garajes.
“Llegan, arman sus puestos y hablan como si estuvieran en el Mercado Las Pulgas y eso despierta a los niños. Se suenan la nariz y escupen”, detalló una vecina.
Señaló que una vez que desalojan el área, son los mismos residentes de la zona quienes asean las calles con agua, cuándo hay, y cloro porque dejan cajas y envoltorios de lo que venden en la vía. Además, algunos no cumplen con la norma de usar mascarilla.
“Entiendo que tienen la necesidad de vender y más con esta situación que estamos viviendo. Por una parte, ellos venden, incluso más barato que las tiendas de la zona, pero creo que el gobierno debe reubicarlos a un área más apta”, detalló la afectada.
Otro vecino indicó que tras una serie de diligencias lograron desinfectar ya que en Pomona hay “muchos” adultos mayores que corren riesgo con la pandemia de covid-19, sin embargo, el trabajo se perdió con la presencia de los buhoneros.
“Vemos con mucha preocupación esta situación, porque se están haciendo jornada de despistaje en la cancha San Trino y los casos han ido en aumento. Exigimos a Omar Prieto presencia activa de los cuerpos de seguridad”, señaló el vecino.
Nueva cotidianidad
Durante el recorrido, Portal de Noticias detalló la presencia en los dos puntos donde los comerciantes informales realizan sus actividades y en ambos estaban presentes los funcionarios de la Policía Nacional, aunque según señalan los vecinos, los uniformados los quitan y luego regresan.
“A veces se llevan preso hasta a tres y por un rato o por ese día se quitan, pero al otro día regresan otra vez como si nada y así están”, indicaron los perjudicados.
Este lunes Omar Prieto, gobernador del régimen en el Zulia, informó que abrirán el Mercado Las Pulgas tras un mes de que sel ordenara el cierre por encontrar un foco de coronavirus que aún arroja casos positivos tanto en Maracaibo como fuera de la frontera regional.
