Esta semana se cumplió un año desde que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la propagación del covid-19 una pandemia mundial.
Las iglesias protestantes y evangélicas del país invitan, a partir del lunes 22 hasta el sábado 27 de marzo, a apartar una hora cada día para orar y reflexionar sobre el clamor, el dolor y la esperanza expresados y experimentados en todo el mundo, durante lo que ha sido un año de sufrimiento sin precedentes, aunque también uno en el que las iglesias han trabajado juntas, innovando constantemente para adaptarse, asistir y acompañar a las comunidades en los procesos de crisis mentales, físicas, económicas y espirituales.
Durante la semana cada día, a las 5:00 pm, líderes de varias denominaciones protestantes y federaciones evangélicas que representan a cientos de iglesias y que hacen vida en el país desde el año 1900 se reunirán virtualmente para ofrecer oraciones, especialmente por las personas más vulnerables y por quienes están en primera línea, cuidándolas, a menudo en circunstancias difíciles. También será un tiempo para renovar el compromiso con la compasión y la diaconía activa, en obediencia a Jesucristo que tuvo compasión por las multitudes y ministro para su sanidad.