Durante una jornada social con más de 20 familias en la parte alta de La Bloquera, en Pariata, estado Vargas, se determinó que 10 de los niños evaluados presentaron graves señales de desnutrición, informó el pediatra Bernardo Guerra, quien participa en el programa organizado por las ONG Motivando a Venezuela y Una Sopa para un Hermano, con apoyo de la Casa Scout Niquitao.
“Niños desde 8 meses hasta 10 años de edad presentan lesiones en la piel por fallas en su dieta alimentaria, que los hace más propensos a infecciones, diarreas, fiebres virales y bacterianas. La desnutrición los hace más sensibles a las enfermedades”, dijo Guerra. Reiteró que solo consumen carbohidratos, pocos vegetales y carecen de proteínas. “No consumen carne ni pollo y el deterioro de su salud es inevitable”, afirmó.
20 familias compartieron. Durante la jornada, los voluntarios repartieron 110 sopas y por varias horas los vecinos fueron acompañados por estas organizaciones preocupadas por la extrema pobreza en el sector.
Julio Reyes, miembro de Motivando a Venezuela, destacó que esa labor social pretende llevar una esperanza al pueblo desasistido y animar a trabajar para mejorar sus condiciones de vida.
Reyes estuvo acompañado por Bianny López, Martha Camperos, Alejandro Lepaje, Gregorio Montaño, Mery Vergara, Alejandro Moreno y Ángel Godoy.
Heidy Quintero de Rodríguez, de la organización Una Sopa para un Hermano, indicó que la solidaridad en los barrios es urgente y cualquier apoyo permite llevar alegría a estas familias. La acompañaron Lino Rodríguez, jóvenes del Grupo del Clan Niquitao, Sonia Pérez, Aura Sánchez, Mary López y Juanita Domínguez, de los cursos artesanales de la Casa Scout.