No existe ningún proyecto de constituyente, así que solo la especulación puede servir para pensar en el impacto que tendría sobre el sector educativo su instauración. Y puestos en ese escenario, el sistema educativo se colocaría al servicio de ese proyecto político, con lo cual la formación se ideologizaría perdiendo toda su libertad, lo que es totalmente contrario a lo que establece la Constitución en cuanto a que el proceso educativo es libre, explicó Víctor Márquez, presidente de APUCV en el foro La Constituyente Comunal y sus Efectos en la Educación, celebrado ayer en la Universidad Central de Venezuela.
La Constitución vigente contiene principios de carácter liberal, no es socialista, entonces hay que adecuarla: eliminar la propiedad privada, “que es el origen de la desigualdad social”, y crear la propiedad comunal. Por eso, la propuesta es una constituyente comunal para convertir a las instituciones educativas no en centros de formación ciudadana, sino en centros de formación política e ideológica. Así, ha llegado la hora de trascender el plano académico y de dar una respuesta estructural: “Nos quedamos en hacer señalamientos sobre lo que ocurre, pero no estamos montados en un análisis que caracterice al régimen. Las universidades no han estado a la altura de la situación política”, reclamó el líder gremial.
Para Luis Bravo Jáuregui, director de la línea de investigación Memoria Educativa Venezolana, la instalación de un Estado comunal desfigurará, todavía más, la autonomía universitaria, con lo cual el artículo 109 de la Constitución se desdibujará en el reconocimiento que hace de la autonomía como columna vertebral de la obra universitaria al servicio del conocimiento, para beneficio espiritual y material de la nación. Además, la comuna consolidará un Estado que se alejará de sus responsabilidades en la educación por la vía de la exageración en su discurso, sin que haya una voluntad real de que se cumpla el artículo 103 sobre el derecho a la educación y todo lo que eso conlleva por parte del Estado. El sistema escolar venezolano viene en caída libre; en cambio, lo único que está creciendo es la atención privada y la rebelión ciudadana.