Celac bloqueo
Foto LUIS ROBAYO / AFP

La reciente reunión de la Comunidad Económica para Latinoamérica y el Caribe (Celac) llevada a cabo en Argentina, que mostró el amplio rechazo que tiene Nicolás Maduro en Argentina, al punto que tal «mandatario» no asistió a dicha convocatoria por un supuesto plan en su contra, llega incluso a revelar cómo hasta uno de ellos acusa subrepticiamente las propias políticas de seguridad de tales eventos, es decir, «presidentes» como Maduro se convierten en los propios saboteadores o indeseables dentro de lo que debería ser un bloque de unión de políticas integrales en el continente.

En tal sentido, se vieron manifiestas críticas al régimen de Nicolás Maduro por parte de varias naciones, incluyendo a la Chile gobernada por la izquierda con Gabriel Boric, quien exigía elecciones libres y otras como Uruguay sustentaban las violaciones de derechos humanos en Venezuela, y hasta el presidente colombiano Gustavo Petro expresaba su deseo por una América Latina sin presos políticos, los cuales se están convirtiendo en la parsimonia de los gobiernos neototalitarios de Nicolás Maduro, Daniel Ortega y Miguel Díaz-Canel.

Por ello, la ausencia de Venezuela en tal cumbre de la Celac, donde previamente Alberto Fernández como presidente anfitrión, y quien antes de llegar a ser jefe de Estado, fue un duro crítico sobre las acciones del propio Nicolás Maduro, revela que América Latina está muy lejos de encontrar una auténtica integración económica, cuando las diferencias políticas emergen por parte de un mandatario que incluso ha acusado a otros como Nayib Bukele de arrastrados al «imperio» y «traidor» al pueblo de El Salvador, cuando la Organización de Naciones Unidas (ONU) señala que más de 7,1 millones de venezolanos han emigrado de la otrora patria del Libertador y país petrolero, debido a la terrible crisis económica que confronta desde hace una década.

Entonces, un país, que además al encontrarse al septentrión de Suramérica es eje de unión geográfica con Centroamérica y el Caribe, si no está ajustado en su condición de Estado con las políticas universales e integrales de reconocimiento mutuo y reciprocidad en sus derechos, no habrá posibilidad de encontrar equilibrio de desarrollo regional, y siempre habrá la discordia, la diferencia y la perturbación política que afecte al resto de los países, aunque estos tengan equilibrios internos en sus instituciones. O sea, Venezuela como nación afecta de manera preponderante la unión suramericana y latinoamericana, y pareciera que el fin estaría anclado en la perversa ideología de imponer sus resquebrajados pensamientos, so pena de convertirse en la bazofia política que manche e impregne de manera pueril cualquier iniciativa para el beneficio de los pueblos en su totalidad.

En consecuencia, mientras Venezuela no retorne a la democracia en términos aceptados integralmente por las comunidades políticas internacionales, o sea, que Nicolás Maduro se mantenga ilegítimamente en el poder; mientras en lo interno es objeto de severas y multitudinarias protestas, con un sistema de gobierno que tiene como salario mínimo y pensiones apenas 6 dólares mensuales; no puede considerarse un miembro de propuestas positivas a organizaciones como la Celac, o cualquiera de sus similares en el continente.

América Latina, que además subyace en su generalidad con agotados sistemas electorales y políticos, mientras aumenta en la mayoría de sus países problemas sociales relacionados con la pobreza y la emigración, no puede ni podrá avanzar. Con los desequilibrios geopolíticos, que fundamentalmente se insertan con la Venezuela totalitaria, simplemente los procesos y cambios serán más lentos, y hasta imposibles, porque en esencia se refiere a la potencia petrolera y energética de la región, afectando con millones de emigrantes y rupturas políticas la asociación estratégica que debería prevalecer entre los Estados.

Si algo ha dejado en evidencia esta cumbre de la Celac es una marcada y nefasta disociación latinoamericana. Venezuela sin democracia: América Latina sin equilibrios geopolíticos.

Mientras Nicolás Maduro dice en un video enviado a la Celac 2023 que no asistió, entre otras razones, por «la persecución permanente, la amenaza», se llevan con rumbo desconocido al jefe de información de El Nacional, José Gregorio Meza. Exigimos su inmediata liberación…

@vivassantanaj_

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