Quién podría refutar que la ignorancia es causa de calamidades sociales, de crímenes contra individuos y la humanidad, que jamás ha podido ser impoluta. Hay una revolución que todavía aguarda por la irrupción del Reinado de la Superioridad Intelectual capaz de instaurarla sin violencia, sólo mediante la firme e irrevocable persuasión que sólo el conocimiento nos catapulta hacia la Razón Suficiente que tiene atributos para convertirnos en humanistas.

Ignoras y el Estado de Derecho no te exime teóricamente por incumplir las leyes. No admito se juzgue periclitado*, por encima de las normas de convivencia pacífica e igualdad ante la Justicia, la impunidad pre intencional o alevosa que irgue soberana en todos los lugares de la Tierra. Alguna vez lo decidieron solemnemente (1789) y todavía la Humanidad permanece absorta:

Hemos decidido solemnemente exponer:

«Que nuestros derechos son naturales, imprescriptibles e inalienables. Los actos de los poderes Legislativo y Ejecutivo del gobierno pueden ser confrontados en todo momento, para que los fines de las instituciones políticas sean más respetados, y también para que las aspiraciones futuras de los ciudadanos [al ser dirigidas por principios sencillos e incontestables] tiendan a mantener la Constitución y felicidad general».

Pregúntale a tus profesores de Ciencias Políticas, Filosofía o Moral y Cívica por qué no les dan por tarea leer la Declaración Universal de los Derechos del Hombre y Ciudadano [pulsa: https://storage.ning.com/topology/rest/1.0/file/get/9826447891?profile=original] 

Estas fueron las máximas fundamentales de la democracia en tiempos de la Ilustración** conforme al razonamiento de Tomás Jefferson, redactor de la Declaración de Independencia de Norteamérica (1776) que influiría el marqués de Lafayette (1757-1834) para formular la Declaración Universal de los Derechos del Hombre y Ciudadano influida, a su vez, por tesis del filósofo Jean-Jacques Rousseau (1712-1778):

Democracia participativa.

Separación de poderes.

Separación de la Iglesia y el Estado.

Libertad de conciencia.

➤ El gobierno debe proteger la libertad de los individuos.

Libertad de expresión y de prensa.

Mis lectores reirán –seguro- de mis lucubraciones en redor de las causas por las cuales imagino que los hombres infectos de «discordiatoxis»  proseguirán sempiternamente bajo querella. No importa, háganlo. En lo más recóndito de mi psiquis anido la liberación que advendrá sin permiso de los mofadores. Puedo mirar esos episodios como si se tratasen de segmentos de una película jamás filmada por ningún director pero escrito por aventajados de una Ilustración en suspenso.

➤✎ https://dle.rae.es/periclitar

➤✎ https://humanidades.com/ilustracion/

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