Se da por finalizada la era de Ramón Carrizalez en Apure, se marcha con las tablas en la cabeza, como en una oportunidad lo describió el exdiputado Rafael Delgado Camejo, en otrora el coordinador de política electoral del MBR-200, MVR, Comando Miranda y del PSUV en el estado Apure, hombre de confianza de Willian Lara en asuntos electorales.

Ramón Carrizalez, con exagerado apoyo del gobierno nacional, no se dedicó a gobernar, su tiempo transcurrió en labores de inteligencia policial, contra los propios dirigentes de partido y de la oposición, logrando la expulsión de innumerables militantes y la renuncia de otros tantos, siempre con el respaldo de Diosdado Cabello, que le permitió tener el control absoluto del territorio, al punto de cambiar generales del ZODI y de la GNB de forma consecutiva demostrando su poder, ejerció el cargo de gobernador con poderes plenipotenciarios, como si aún fuese el ministro de la Defensa o el vicepresidente de la república, maltrato a ministros y viceministros a quienes no se les aceptó autonomía en sus dependencias en la región,  los directores nacionales a pesar de sus pésimas gestiones solo actuaban según mandatos del gobernador y los ministros, aunque incómodos, no podían decidir en contra de sus determinaciones. Hizo de Apure su propia república.

Pierde las primarias por el enorme descontento en su contra. Los diputados del Consejo Legislativo del Estado Apure (CLEA), en conjunto con la mayoría de los alcaldes y exalcaldes, se aliaron para desafiarlo en un terreno que Carrizalez nunca abonó, “la estructura del partido”. En el momento preciso lo rechazaron ocasionándole una estrepitosa derrota, liderada por Pedro Danilo Leal, alcalde actual del municipio Pedro Camejo. De acuerdo con dirigentes del PSUV e incluso algunos candidatos, los números no fueron los expresados, la derrota fue aplastante, de ahí en adelante Carrizalez utilizó su vínculo con la dirección política del PSUV para modificar los resultados y el baremo aplicado para adjudicar los candidatos, logrando que la dirección nacional impusiera a Eduardo Piñate, hombre de confianza de Nicolás Maduro, quien utilizó el conflicto interno del partido para restarle un alfil más a Diosdado Cabello, no bastando con suprimir la voluntad de los electores del PSUV a nivel regional, sino que impuso algunos candidatos alcaldes con los que dirige una sedición en conjunto con los directores incondicionales, asegurando que muchos de ellos serán reubicados en cargos de dirección nacional que desde ya gestiona, situación que luce contradictoria, toda vez que Nicolás Maduro no lo desea en su círculo de confianza.

Conservar la hegemonía del estado lleva implícito el plan de posicionar a la alcaldesa y candidata en el municipio San Fernando, profesora Ofelia Padrón, quien ha sido su más fiel aliada en todo el proceso destructivo que han llevado a cabo en el propio PSUV y en el territorio apureño, posee dominio del alcalde y candidato de Achaguas, del candidato en Rómulo Gallegos, del candidato del municipio Muñoz, que tiene el propósito de inmolarse si es necesario para favorecer a Ramón Carrizalez, en su plan de desarticular y restarle apoyo al candidato Eduardo Piñate. El vencedor de las primarias, Pedro Leal, aunque su visión es diferente a la del coronel Carrizalez, también trabaja en la dirección de augurarle una derrota a Piñate, creyendo que él sería bendecido por la dirección nacional  y contaría con el respaldo para dirigir el PSUV en Apure sin la presencia de Carrizalez y Piñate.

Con este corolario se debe asumir que la conspiración es real. Los directores regionales y nacionales tienen órdenes de no resolver peticiones del equipo político del candidato; el representante del gobernador en Guasdualito, en la tradicional casa de gobierno, se ha afincado en minimizar al candidato, lo que ha provocado fricciones con el alcalde y candidato a la reelección en el municipio Páez. Considerando que esa actitud lesiona sus propios intereses y la organización donde militan, la Corriente Revolucionaria Bolívar y Zamora (CRBZ), en vista del compromiso que han asumido con la candidatura del PSUV,  los días transcurren acercándose las cacareadas elecciones del 21 de noviembre con un escenario confrontativo en el PSUV. Ramón Carrizalez tiene una actitud combativa en contra del candidato que el mismo gestiono y Maduro impuso, creyendo Carrizalez que podría manejarlo sin complicaciones, sin estimar que se saldría del redil, para hacer su propio equipo, con factores adversos a Carrizalez, como el cantante Vitico Castillo, entre algunos otros dirigentes que ahora pasan a ser el círculo íntimo de Eduardo Piñate, que si bien ha tenido grandes obstáculos por el gobernador, él propiamente es un candidato que no logra posicionar su liderazgo, su narrativa es débil y las propuestas todas fracasadas, no tiene poder de convencimiento, en cada entrevista exhibe exagerados niveles de torpeza e incapacidades.

La MUD y su incapacidad de aprovechar las debilidades del PSUV

La MUD se presenta en el proceso electoral con Luis Lippa de candidato a la Gobernación de Apure, quien se encontraba inhabilitado por malversación de fondos en su gestión de gobernador en el periodo 2000-2004, quien dispuso durante esos 4 años los recursos de cestatikets compensatorios del salario de educadores y la policía estadal, y los destinó a contratos de obras públicas a unas cuantas empresas, entre ellas constructora Los Peloteros. C. A., propiedad del ingeniero Richard Sanz, quien a su vez era el contratista consentido de Hugo Armando “el Pollo” Carvajal, hoy privado de libertad en España. A través de esta empresa se ejecutó la base Manuel Antonio Ríos de los aviones Sukhoi, en el estado Guárico.

Sobre Luis Lippa se ciernen profundas dudas, por además aparecer en el informe capítulo II, Corrupción y Crimen en las regiones: Estado sin ley, elaborado por Transparencia Venezuela, auspiciado por la embajada británica, quienes establecen en su investigación que Lippa financió al ELN colombiano, en su gestión como gobernador. Con estas y otras dudas, es inscrito por la MUD el ultimo día de prórroga de las inscripciones; sin embargo, ya vociferaba que era un hecho por las intermediaciones de Henrique Capriles y del ahora “rector” Roberto Picón, en medio del gran acuerdo existente entre PJ y el PSUV, para ir en perjuicio de Juan Guaidó. Además de esta serie de cuestionamientos, a la Gobernación de Apure también van aspirando Ronald Torres por AD usurpado por el TSJ, en dirección de Bernabé Gutiérrez, quien en el proceso de Asamblea Nacional, en diciembre de 2020, habría obtenido 10.000 votos, pero con alto cuestionamiento por apuntalar la alacranización de los partidos, e igualmente un candidato más joven; Franklin Martínez con orígenes en AD, con perspectivas interesantes, toda vez que ha logrado una sumatoria de jóvenes a su campaña; sin embargo, estigmatizado por ser el candidato del partido de Claudio Fermín, organización alacranizada por el régimen, utilizada para favorecer sus intereses y debilitar a la oposición, estrategia recurrente dentro del PSUV, que ha puesto en escena las grandes debilidades de los dirigentes de oposición, que han sido corrompidos para estos fines.

Dentro de los candidatos alcaldes ocurre lo mismo. El cuestionamiento dentro de los candidatos de la MUD, es realmente escandaloso, algunos alcanzando peor récord que los propios del PSUV, teniendo algunos graves denuncias, expedientes judiciales por homicidios, y vínculos con los grupos irregulares que operan en el estado Apure.

Con este panorama se llegará al fraude electoral del 21 de noviembre, con dos fuerzas políticas, la MUD y el PSUV, con alto cuestionamiento ético y moral, que se traducirá en abstención al proceso, por no ser un mecanismo que garantice transparencias, por cuanto el manejo del CNE, el ventajismo de recursos de los candidatos del régimen, la presión de grupos violentos y de irregulares en las zonas rurales, sumado al control del combustible, marcan definitivamente las características del régimen en todos los procesos electorales, acentuándose a partir del año 2015, que no ganan elecciones, se las roban.

@Jufraga12

 

 


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