El Bahaísmo: Continuo con el propósito de dar a conocer a los lectores de esta columna sobre las diferentes religiones que no es habitual ver información y noticias. Me gusta investigar sobre las religiones, por que el ser humano, que tiene esa chispa divina dentro de sí, y que al entrar a este plano denso nos es velado nuestro conocimiento del estado primigenio, y las religiones y las ordenes de sendero espiritual están en la misma línea de ir al encuentro de este conocimiento, incluso creamos formulas, caminos y senderos diferentes, pero con los mismos fines e ideales, y por esto último, las religiones tienen mi más profundo respeto. Porque todo está sometido a los niveles del estado de conciencia del ser humano. Y es bueno e importante recalcar que la Augusta Institución Masónica jamás tiene ni intencion, ni interés de persecución a ninguna creencia religiosa, y esto lo demostramos que los miembros de la Masonería son de diferentes credos religiosos. El conocimiento que ofrece la Masonería por medio de sus “Simbología” le sirve a los masones de diferentes credos religiosos a “comprender” más a profundidad la simbología de las religiones que también le ofrecen conocimiento sobre la misma. Claro está, si un masón en el transcurso de los años en la augusta institución cambia de opinión sobre su forma de pensar, no es por la Masonería, es porque nosotros somos investigadores de todo lo que observamos, conocemos y estudiamos. Para poder comprender el conocimiento de la simbología masónica es indispensable practicar “el desprendimiento” y el “No apego” que nos lleva a ser libres. ¿Qué es ser libre?, es no estar sometido a los dogmas, ser ortodoxos y fanatismo. Hay credos religiosos que caen en este campo del fanatismo, pero también merecen nuestro respeto. Nosotros en la masonería no discriminamos a nadie por credos religiosos, políticos, filosóficos, solo que nuestras normas nos prohíben hacer proselitismo, y la causa principal, es para no herir susceptibilidades. Siempre lo digo y lo repito: nadie tiene la culpa de nacer en las diferentes culturas, mayormente por esto es que merecen mi mayor respeto y así somos en la augusta institución masónica. Es increíble decirlo, hemos sido perseguidos, vejados, pérdidas de vidas, solo porque somos “Libres”, no estamos atados ni a dogmas ni fanatismo. En esta oportunidad voy hacer un leve resumen sobre la religión “Bahaísmo” (Fe Bahá´í). Es una religión “monoteísta” (se reconoce un solo Dios Creador que expresa su voluntad). Es una religión independiente, ni un movimiento reformador de otra religión, no es un sistema filosófico, no es una secta, ni mucho menos una una religión sincrética. Se considera que tiene más de ocho millones de seguidores. Solo tienen ocho Templos Sagrados en el mundo, por lo tanto la mayor parte de sus reuniones espirituales se realizan en casa de alguno de sus seguidores. Para esta religión se considera a todos los seres humanos, sin distinción de género, raza, posición económica, que todos somos iguales ante el Creador, por lo tanto somos una humanidad sin distinciones y límites. Hay un respeto por todas las religiones, pues consideran que todas tienen la misma fuente divina y tienen los mismos fines e ideales. Según la historia de esta religión, su origen se debe a dos fundadores en la región de Persia por los años de 1844: Siyyid ‘Alí-Muhammad, quien adopto el nombre de Bab (significa “la puerta”, una instancia de tránsito entre lo divino y humano) y Mirza Husayn Ali Nuri, que se le conoció con el nombre de Bahà’u’llàh (que significa la gloria de Dios). El Bahaismo conocido también como la Fe Bahá´í, la cual se deriva del nombre Bahà’u’llàh, el cual traduce: perteneciente a Bahá. El Bahaismo, por boca de su líder “Bab”, predica la venida de un prometido por los profetas de las diferentes religiones, “El Mesías”, el mensajero y la manifestación de Dios. En el año 1850 “Bab” fue perseguido y ejecutado por el régimen iraní de aquellos tiempos. Después de su muerte el movimiento religioso se dividió en dos vertientes: los “Azali” y los “Bahai”, que persisten en nuestro tiempo y son más numerosos. La religión manifiesta que el mundo tiene ciclos de 2.031 años, y cada ciclo es un tiempo de evolución, pues la humanidad y el universo son eternos. El Templo principal de la religión se encuentra en Haifa, en las tierras de Israel. Tienen representación en más de 180 países. Es una religión pacifista, libre de prejuicios, propicia la armonía entre la ciencia y la religión, y la educación obligatoria sin distingos de sexo. Un aspecto muy importante: predican que la “Verdad” está en el interior de cada ser humano, por lo tanto no tiene ritos, sacerdotes, sacramentos ni rituales de iniciación. Su “Símbolo es una Estrella de Nueve Puntas” que representa la combinación de todas las religiones. Tienen un libro Sagrado: el “Kitab al Aqdas” (Libro de la Santidad). El “Nueve” es un numero sagrado: nueve los días sagrados, nueve para crear un centro y nueve para entrar al Templo. Sus principios: La Unidad de Dios, La Unidad de la Humanidad y la Unidad de la religión. En el año de 1863 Bahà’u’llàh se presentó como el mensajero de Dios (Mesías) que “Bab” había anunciado, y falleció el 29 de mayo de 1892 en la colonia penal de Acre, hoy Israel y su sepulcro se considera el más sagrado del mundo. Su órgano legislativo es la “Casa Universal de la Justicia” (1963) en Haifa. Normas: se prohíbe el alcohol, castidad extramatrimonial, fidelidad, se permite el divorcio, no al ascetismo o monástica, no juegos del azar, no indolencia y pereza, el trabajo es sagrado, no política, no matar, no robar, no al extremo de la pobreza y la riqueza. Se debe seguir la ley por amor y no por temor a Dios. La familia es la piedra angular de la sociedad. Este es un resumen de esta fascinante religión.

 


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!