La mayoría de los países latinos exigieron al Estado rendir cuentas de lo acontecido en 2017, a propósito del Examen Periódico Universal que se celebró en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU este martes 26 de enero de 2022.
Con la participación de 116 países miembros, tanto el Consejo de Derechos Humanos como la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, dejaron ver que están en pleno conocimiento de las violaciones graves de derechos humanos y crímenes de lesa humanidad cometidos en el país. Todos los altos comisionados de la ONU para los Derechos Humanos han hecho recomendaciones en cada EPU que nunca ha cumplido el Estado venezolano y en esta oportunidad la mayoría de los países latinos, excepto Cuba y Nicaragua, exigieron rendición de cuentas sobre los hechos acontecidos durante las manifestaciones del 2017, cuando el Plan Zamora creado por decreto presidencial ejecutó la represión sin límites, detenciones arbitrarias, torturas y asesinatos.
Una novedad que podemos destacar en este examen es la participación del Estado del Vaticano como invitado observador por la ONU, luego de hacerse público el informe de la Misión Independiente de los Hechos sobre Venezuela que ordenó el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas y el informe de la alta comisionada Bachelet después de visitar el país, que incluyó su denuncia sobre las detenciones arbitrarias y ejecuciones en Venezuela que continúan con total impunidad.
La prepotencia y la mentira del Estado es insostenible al hacer creer que su participación en la ONU fue excelente y victoriosa cuando no es verdad. Olvida que un aliado como Bolivia le recomendó regresar al sistema interamericano de la OEA.
Exhorto a la ONU consignar esta nueva evaluación ante la CPI y plantear celeridad el proceso de investigación sobre los crímenes de lesa humanidad cometidos en Venezuela.