Así se computó y determinó la felicidad mundial
Desde el año 2012 Naciones Unidas emite un informe anual que establece un índice de felicidad de las naciones denominado “Informe Mundial de la Felicidad”, publicado por el Instituto de la Tierra de la ONU. De esta manera se refleja —desde hace más de una década— la importancia que ha adquirido la felicidad para el desarrollo de la humanidad. Se establecen estadísticas y parámetros sobre el hambre, las carencias, las epidemias y pandemias, entre otros parámetros. Con ello, la ONU ofrece una nota positiva de la felicidad y ha repetido el informe anualmente, dándole más atención a la felicidad como criterio de valoración de los países. Así, cada año se revisa el estado de la felicidad en el mundo, lo que nos demuestra cómo la nueva ciencia de la felicidad explica, además de las variaciones personales, a las variables nacionales de los países, en el índice de felicidad. (Helliwell, John F., Richard Layard y Jeffrey Sachs, eds. 2012. “Informe sobre la felicidad en el mundo”. Nueva York: Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas).
Obviamente, cuando Naciones Unidas ha aceptado la felicidad como un objetivo a alcanzar por los gobiernos de los países, esto trae como con secuencia efectos profundos en los programas y las acciones de los organismos oficiales.
Reporte de marzo de 2024
En el Informe de Felicidad de 2024, los países que figuran en los primeros lugares son Finlandia, Dinamarca, Islandia, Suecia, Israel, Holanda, Noruega, Luxemburgo, Suiza, Australia, Nueva Zelandia, Costa Rica, Kuwait, Austria y Canadá. Llama la atención que los países más ricos y desarrollados del mundo, como Estados Unidos, Francia, Alemania, Reino Unido, Italia, Rusia o China, no están entre los quince primeros puestos. También, que Costa Rica de Latinoamérica esté entre los primeros. México figura muy bien en felicidad en el puesto 25, subiendo considerablemente.
Entre los menos felices se encuentran, en el último lugar, Afganistán, antecedido por Líbano, Lesoto, Sierra Leona, Congo, Zimbabue, Botsuana, y Malawi. La India, a pesar de su desarrollo económico, se define como una de las naciones menos felices en el puesto 126. Los territorios palestinos se colocan en el número 122 de un total de 146 países medidos. Ucrania se encuentra en el número 99, 20 menos que en 2020. Rusia se encuentra en la posición 72 y Estados Unidos en la número 16, subiendo en el índice de felicidad desde el año 2023 cuando ocupó el puesto 17, un punto, y ascendiendo en felicidad de las cifras de los informes de 2016-2018 en 3 puntos cuando estaba en la posición 19. Venezuela, un país que aparecía en el primer informe de naciones unidas de felicidad con un buen índice en el puesto 23, ha decaído 56 posiciones al puesto 79. Quizás por ello han emigrado del país más de 8 millones de ciudadanos en los últimos años.
El informe mide seis variables claves como los ingresos per cápita de los ciudadanos, el apoyo social, la esperanza de vida saludable, la libertad para tomar decisiones de vida, la generosidad, la cohesión social, la benevolencia y la ausencia de corrupción. Estas variables tienen efectos significativos tanto en las emociones positivas como en las negativas. (Helliwell, JF, Layard, R., Sachs, JD, Aknin, LB, De Neve, J.-E. y Wang, S., eds. “Informe mundial sobre la felicidad”, 11.ª ed. Red de Soluciones para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas).
¿Por qué se sienten los ciudadanos felices o lo contrario?
Los países de menor calificación durante todos los años que se ha emitido el informe de felicidad nos ilustran que la principal causa de infelicidad son las guerras que padecen sus naciones, aunque en ellas aumentan las variables de benevolencia y solidaridad asociadas a la felicidad. A través de los años tomamos algunos países que figuran en los primeros puestos de felicidad y analizamos algunas de las posibles razones detrás de estas calificaciones.
Finlandia ha mantenido su posición como el país más feliz del mundo por seis años consecutivos, lo que tiene que ver con su fuerte sistema de bienestar social, educación de calidad y atención médica universal. Altos niveles de confianza en las instituciones públicas, acceso a servicios de salud de calidad y una cultura equitativa. Los países nórdicos como Finlandia, Suecia o Dinamarca poseen fuerte seguridad social, apoyo gubernamental a la educación y la igualdad de género y una cultura de “hygge” que enfatiza el vivir en una atmósfera cálida y disfrutar de las cosas buenas de la vida con buena gente. También por su nivel de igualdad social y la calidad de vida. La cultura “hygge” es un concepto danés que se refiere a un estilo de vida que promueve la comodidad, la relajación y la felicidad en los momentos cotidianos. Se trata de disfrutar de las pequeñas cosas de la vida, como una taza de té caliente, velas aromáticas, una cena con amigos o una noche acogedora en casa. También se promueve la conexión social y la convivencia en familia o con amigos, así como la práctica de actividades que ayuden a relajarse y a desconectar del estrés diario. Esta filosofía ha ganado popularidad en otros países como una forma de encontrar la felicidad en la simplicidad, en el minimalismo y la comodidad de la vida diaria.
Suiza presenta elevados niveles de bienestar financiero, atención médica de primer nivel, un alto estándar de vida y un ambiente natural cuidado, lo que contribuye al bienestar general de sus ciudadanos.
Islandia cuenta con una cultura muy igualitaria, apoyo a la educación, un fuerte sentido de la comunidad y un medio ambiente único.
Holanda mantiene claros niveles de equidad, un desenvolvimiento económico estable y un competente sistema de seguridad social. Además, practican una cultura tolerante e inclusiva y disfrutan de un sistema de transporte público bien desarrollado y una economía estable. Al mismo tiempo, es un líder mundial en energía renovable y sostenibilidad.
Como vemos existen varios factores que contribuyen a la felicidad en los países mejor calificados, que figuran con altos niveles de confianza, bajos de discriminación y aumento de la cohesión social, apoyo gubernamental, una economía sana, una cultura de cuidado, bienestar para todos, y altos grados de libertad personal.
Los países menos felices
El Informe Mundial de la Felicidad indica asimismo algunas de las razones por las que otros países tienen niveles de felicidad más bajos. En el caso de Afganistán, ha estado en conflicto armado durante décadas y tiene una de las tasas más altas de muertes violentas del mundo. También sufre una economía en crisis y altos niveles de pobreza y desempleo.
Zimbabue ha experimentado una inestabilidad política permanente y una economía en declive durante muchas décadas, lo que ha llevado a la pobreza y desigualdad. También ha presentado crisis humanitarias, incluida la falta de acceso a alimentos y agua potable.
Tanzania tiene una economía en desarrollo, pero enfrenta desafíos importantes en términos de pobreza, acceso limitado a servicios de salud y educación, y altos niveles de corrupción. Otros países africanos han estado en conflicto armado interno durante muchos años, lo que ha generado una crisis humanitaria, pobreza y desigualdad, con presencia de problemas en la provisión de servicios básicos, como atención médica y educación.
La felicidad es uno de los valores de la humanidad
Debemos tener en cuenta que hay muchos factores que suman puntos a la felicidad de una nación, y estos pueden ser complejos y multifacéticos. Otro punto es que hablamos de cómo se siente la mayoría de los ciudadanos de estos países, pero en cada uno de ellos existen ciudadanos felices a pesar del bajo puntaje de su país. De igual forma ciudadanos que se definen “infelices” se encuentran en las naciones calificadas como muy felices.
Al final, la felicidad es un sentimiento, una emoción y una decisión personal. En general, los países menos felices tienen problemas como conflictos armados, inestabilidad política, falta de acceso a servicios básicos como la atención médica, la educación y la vivienda, y una economía en crisis. De la misma manera hay desafíos culturales, sociales y de discriminación que contribuyen a no estar felices en estos países. Entre los países con mayor apreciación de felicidad, como Australia y Canadá, disfrutan una cultura de integración social, de tolerancia y de no discriminación, y son pluriculturales y multirraciales con amplias garantías en el ejercicio de las libertades personales.
Costa Rica no figura entre los primeros países de economía desarrollad, no obstante sus ciudadanos se sienten contentos y felices, como lo expresan en su famoso lema: ¡Pura Vida!…
El Día Internacional de la Felicidad del pasado 20 de marzo —día del solsticio de primavera—, se institucionalizó en la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas el 28 de junio de 2012, y se comenzó a celebrar en marzo de 2013. Esto implica que la mayoría de las naciones del mundo aceptan el concepto de felicidad como una variable para evaluarlos en su gestión. Se instauró de hecho que la felicidad es un valor humano y los gobiernos deben procurarla. (Maestría de la felicidad, Gessen y Gessen, pp. 32-39, 2024).