La familia es nuestra razón de ser, por eso nos sentimos muy a gusto y satisfechos, cuando podemos reconocer sus logros y sus éxitos. Este es el motivo por el cual resulta prioritario considerar la importancia de la motivación, como una forma de apoyar y valorar al grupo familiar. De esta manera, es oportuno ayudar a fomentar su potencial al máximo, pues el reconocimiento representa una gran fuente de energía que motoriza.
Debemos recordar que esta práctica bien aplicada puede funcionar de forma efectiva para hacer que tus hijos fortalezcan y aprovechen ampliamente sus habilidades y capacidades. Además, utilizando el mensaje acertado con manifestaciones que realcen, elogien y aplaudan sus acciones tratando de enaltecerlos, procuramos establecer una excelente vía para lograr que se entusiasmen y así, sean más tenaces.
De esta forma, manifestándoles frases positivas que exalten la buena labor que están realizando, dándoles ánimo para que se apasionen con los alcances de su esfuerzo, se logra además que sean perseverantes. La constancia es un atributo importante que nos lleva a no desistir hasta que logramos consolidar los objetivos propuestos. La motivación, por su parte, es un excelente motor para que nos sintamos inspirados y no nos rindamos.
Otra manera de mantener a los hijos motivados, consiste en resaltar sus aptitudes y capacidades, dándoles argumentos para que crean en sí mismos e internalicen su inteligencia, brindándoles seguridad y haciéndoles ver que confiamos en ellos. Igualmente, cuando escuchamos con atención sus opiniones y las tomamos en cuenta, advierten que le damos importancia a lo que piensan. Así, se sienten impulsados a comunicarse y expresar sus inquietudes a sus padres.
También, ser positivos es un excelente atributo que debemos promover en el hogar, para mantenernos motivados y de alguna forma, propiciar una buena actitud para sobreponerse a las fallas, asumir los errores y aprender de las experiencias menos favorables. El optimismo reafirma esa energía favorable que requerimos para seguir adelante, buscando aprovechar las mejores oportunidades y continuar con buen ánimo, hacia el logro de nuestros propósitos.
Debemos recordar que ante todo la familia es ese núcleo importante que sirve para formar las bases de una actitud comprometida, para lograr las aspiraciones personales. Por lo tanto, la motivación que se realice en el hogar será determinante para que sus miembros asuman con la mejor actitud cualquier reto y para eso el grupo familiar desempeña un papel fundamental.