Más allá de las consideraciones de tipo jurídico formuladas por Allan Brewer Carias y otros jurisconsultos sobre la inconstitucionalidad e ilegalidad de la llamada ley anti bloqueo; lo que encierra el articulado de dicha ley en el fondo es un abierto reconocimiento del fracaso del llamado Socialismo del Siglo 21. Veamos referencialmente lo jurídico.

Brewer Carías califica dicho proyecto de ley como “….la más monstruosa, jurídicamente hablando, de todas las propuestas de decisiones que se han adoptado en Venezuela desde 1999”. https://efectococuyo.com/politica/brewer-carias-ley-antibloqueo-es-una-monstruosidad-juridica/

Por su parte, el exmagistrado Juan Carlos Apitz indicó: “Pero lo más importante aquí es que van a realizar gastos sin ningún tipo de control. Porque ellos pueden desaplicar cualquier ley del ordenamiento jurídico y lo hace el Ejecutivo nacional sin ningún tipo de límite”. https://talcualdigital.com/ley-antibloqueo-es-multiuso-propaganda-mas-discrecionalidad-y-desaplica-leyes/

Y un abogado vinculado al chavismo como lo es Luis Brito García, comunista sempiterno, al hacer su crítica a la ley señala: “En lugar de ampliar los bienes de propiedad pública o bajo administración social, como corresponde a un gobierno socialista, se amplía y fortalece la propiedad del sector privado, y sobre todo del internacional, incluso la que esté afectada por medidas ejecutivas, legislativas o judiciales”. https://ultimasnoticias.com.ve/noticias/especial/proyecto-de-ley-antibloqueo-luis-brito-garcia/.

Y es que el análisis más allá de lo jurídico, nos va indicando (oh sorpresa) que el otrora gobierno socialista se está transformando en un régimen abiertamente capitalista. Frente a la hecatombe económica, no le quedó otra alternativa que la de girar bruscamente a la derecha, a tal punto que incluso se atreven mediante una ley, derogar varias normas socialistoides contenidas en la Constitución que ellos mismos elaboraron y que de paso, son replica de la Constitución de 1961.

El fulano gobierno socialista de que tanto se ufanaban Chávez y sus seguidores, incluyendo a Maduro, con esta ley, formará parte de un pasado que poco a poco dejarán de invocar. Con la apertura total a la inversión extranjera, las consignas y gritos de los militares de “independencia y patria socialista” serán simplemente  consignas. Y el perfil elaborado por Padrino López en su cuenta de Twitter que dice que está “decidido y convencido de seguir construyendo la patria socialista”; se convertirá en una frase hueca, vacía de contenido y sustento en la realidad de los hechos. La cambiará? Lo dudo. Al fin y al cabo cuando se persigue el poder por el poder mismo, que importan las consignas y las ideas; lo importante es mantener el poder, aun cuando se auto califique de algo que no es. Que tristeza; tanto nadar en lo profundo para venir a ahogarse en la orilla.

Uno de los aspectos más importantes de la ley, es el indicado en el artículo 27 de la misma que contempla la posibilidad cierta de reintegrar a sus legítimos dueños las propiedades injustamente expropiadas y/o confiscadas por Chávez al inicio de su mandato. Es decir, quienes fueron propietarios por ejemplo de Agroisleña o la Marqueseña tienen la esperanza de recuperar sus propiedades. Atrás quedará para el olvido, la triste escena del ministro de agricultura y tierras Juan Carlos Loyo, quien con pistola en la cintura arrebató las propiedades de exitosos hacendados del sur de lago de Maracaibo y de toda Venezuela. Según Fedeagro, totalizan más de cinco millones de hectáreas productivas las confiscadas por el régimen. Pendientes quedarán las indemnizaciones por las pérdidas ocasionadas a estos ciudadanos en caso de que se lleve a cabo dicha restitución. Y eso está por verse, por cuanto la discrecionalidad del ejecutivo para determinar quién es o no  propietario de un activo es ilimitada.

El proyecto de ley, de ser aprobado, es tan radicalmente de derecha que convierte a Venezuela prácticamente en un país en subasta. Se renuncia al nacionalismo.

Habrá que ver el debate de la fulana constituyente en donde tendrá lugar la discusión de esa ley, para ver quienes dentro de ese cuerpo amorfo, se atreverán a invocar a Marx, al Che Guevara, a Fidel o al propio Chávez para oponerse a una ley absolutamente medieval desde el punto de vista económico en la que se le da una patada a la Constitución de 1999 y convierte a Venezuela en una hacienda propiedad del capataz mayor Nicolás Maduro.

@JotaContrerasYa


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