En las mañanas deltaicas

De intensas lluvias

De agua sobre aguas

Despierto del sueño profundo

Y en el letargo incesante

Enlentecido que lleva los borales

Dulcísimos hacia horizontes sonámbulos

De salobres finitudes

Me veo convertido en codiciado

Animal fluvial que boga aguas abajo

Tras las corrientes turbias que vienen

De lejanas vecindades

Cuando amaina el diluvio sobre

Los vastos dominios acuáticos

Yo me hastío de nadar y quiero

Ser pájaro y añoro volar como lo

Hacen ciertos peces voladores

Y ansío beber de la ancha copa

Celeste un aire purísimo que me

Santifique y haga danzar enloquecidas

Ebriedades trazando arabescos

Incomprensibles sobre la tela invisible

Del aire sobre el aire

Así transcurren las horas lentísimas

De días interminables

Entre  la lluvia incesante

y tenues rayos del cielo mandarina

y yo presa de mis febriles imaginaciones

Fantásticas del sueño nocturno para entrar

En   nuevas cavilaciones y así ad infinitum


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