La noche del 17 al 18 de noviembre de 1941, víspera de la Operación Crusader (acción del Octavo Ejército que buscaba recuperar el territorio de Cirenaica que estaba en manos del Eje en el Norte de África durante la Segunda Guerra Mundial), un comando británico de 32 hombres desembarca tras las líneas enemigas en Beda Littoria (sede del cuartel logístico) con la intención de capturar o asesinar al más importante oficial del Afrika korps: el mariscal Erwin Rommel: el “Zorro del Desierto”. El hecho es representado en la primera escena de la película que inició su mito en el cine: Rommel Desert Fox (Henri Hathaway, 1951), y al final un soldado británico que es capturado por un alemán le pregunta a este si Rommel ha muerto, recibiendo como respuesta las palabras: “No sueñes”. La llamada Operación Flipper (teniente coronel Geoffrey Keyes) fue un fracaso porque el mariscal celebraba su cumpleaños (15 de noviembre) en Roma. De la operación solo escaparían dos soldados, el resto murió en la acción o fue capturado. A pesar de ello la ofensiva del Reino Unido comenzó y después de grandes sacrificios hizo retroceder a los alemanes a su punto de partida: El Agueila.

En nuestro proyecto de investigación y divulgación sobre el 80 aniversario de la Segunda Guerra Mundial, dedicamos los tres primeros meses del presente año a la Guerra en el Desierto del Norte de África. La sorprendente conquista británica de la Cirenaica italiana de Libia (Operación Compass, del 9 de diciembre de 1940 hasta el 9 de febrero de 1941), fue seguida inmediatamente por una –¡mucho más sorprendente!– contraofensiva de esa pequeña fuerza alemana liderada por un general que ganó el reconocimiento de todo el mundo en la Operación Sonnenblume (del 24 de marzo al 12 de abril de 1941). Pero ante la expansión alemana en los Balcanes (entre abril y mayo) y la Operación Barbarroja (invasión a la Unión Soviética (URSS) del 22 de junio al 5 de diciembre de 1941), la atención tanto del Reino Unido como del Tercer Reich en las arenas del Sahara disminuyó gradualmente. No podemos olvidar que Adolf Hitler dedicaría 80% de su Wehrmacht al Frente Oriental. La maestría de Rommel estaría en mantener un ejército moderno sin casi abastecimiento de combustible, repuestos, reemplazo de armas y soldados y el necesario descanso en medio de terribles condiciones ambientales (sofocante calor de día, frío de noche, escasez de agua, tormentas de arena y el ataque de todo tipo de animales: desde serpientes y escorpiones, hasta chinches y nubes de moscas). Los británicos tenían Alejandría y El Cairo para divertirse, y el apoyo de muchos soldados de todo el Imperio e incluso los que huían de la Europa ocupada (a Tobruk llegaron más de 5.000 polacos, pero también indios y checoslovacos; de modo que los australianos tomarse unas “vacaciones”).

La campaña durante 1941 y la primera derrota del “Zorro” pueden ser explicadas con una sola palabra: Tobruk. El Afrika korps fue incapaz de conquistar este sitio estratégico (puerto y ciudad fortaleza tomada por los británicos el 22 de enero) que podría permitirle seguir hacia Alejandría y el Canal de Suez al facilitarle supuestamente la logística y no ser atacados por la retaguardia. Por esta razón la sitió pero como la Royal Navy dominaba el Mediterráneo pudo ser abastecida aunque bajo el ataque de la Luftwaffe.  Los británicos buscaron romper el asedio con las Operaciones: Brevity (15-16 de mayo) y Battleaxe (15-17 de junio), pero una vez más la genialidad de Rommel con su engaños (las nubes de polvo generadas por camiones hacían pensar que eran muchos más tanques de los reales, y usaba los verdaderos como señuelos para atraer al enemigo a sus mortales cañones antitanque FlaK de 88 mm) evitaron el rescate. El primer ministro Winston Churchill reemplazaría al comandante de toda la región: el general sir Archibald Wavell, buscando uno más audaz, confiando en el general Claude Auchinleck, y la Western Desert Force fue reorganizada y renombrada como Octavo Ejército bajo el teniente-general Alan Cunningham. La planificación estableció que para lograr la victoria se actuaría en noviembre cuando se lograría duplicar el número de tanques y aviones de los alemanes llegando a casi 800 respectivamente (con los nuevos Crusader y también los estadounidenses ligeros M3 Stuart que se unían a los Matilda).

El 18 de noviembre se inició la Operación Crusader que duraría hasta el 30 de diciembre y que pondría fin a los 240 días de sitio que padeció Tobruk el 27 de noviembre, asedio que muchos relacionan con las condiciones de las trincheras de la Gran Guerra (1914-1918). Los británicos tuvieron muchas bajas, pero las sufridas por el Afrika korps lo colocaron en una situación que no podían resistir. Los convoyes del Eje eran hundidos en más de 70% debido especialmente a la posesión de la isla de Malta frente a sus rutas, y el Zorro del Desierto tuvo que volver al lugar de partida a principios de año; pero ya preparaba el contraataque que explicaremos –Dios mediante– el próximo mes de febrero. Todo el año de 1941 para Rommel es admirable en lo relativo al arte militar, pero también acá en el Desierto la guerra se acercó a cierta caballerosidad o reglas de honor del guerrero y en él tiene un buen ejemplo. He intentado desmontar su mito pero he terminado por reconocer que fue un genio en los campos de batalla.

Al preparar este artículo nos admiramos de la cantidad de fuentes que existen, en especial el material autobiográfico. Es lamentable que la cinematografía relativa a la Segunda Guerra Mundial siga con los temas de siempre e incluso haciendo remakes y no explote esta mina de historias. Más adelante les daremos los títulos. No debemos dejar de recordar que el 17 de noviembre se cumplen 80 años del suicidio de uno de los hombres que más influyeron en la creación de la Luftwaffe: el coronel general Ernst Udet (1896-1941), piloto y director de su Departamento de Investigación y Desarrollo. La próxima semana comenzamos una nueva serie que explicará el Frente del Pacífico con la expansión del Imperio del Japón y el camino a Pearl Harbor.

 


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