Este artículo lo voy a dedicar a los venezolanos que deseamos transformar nuestro país en uno del primer mundo.
Quiero empezar señalando que todo cambio en sentido correcto en ocasiones es el producto de decisiones sobrevenidas por severas condiciones, es el caso de algunos países a los que haré mención, tales son la Alemania de posguerra, los países bálticos, el mismo Japón de posguerra, España post-Franco, todos estos países han tenido en común estas terribles experiencias de dictaduras y tiranías que les han marcado en la historia reciente, pero lo más determinante es la transformación sobrevenida luego de su liberación, que les han llevado desde un estado de miseria al de naciones prósperas.
En Venezuela tenemos algo en común con la historia de esos países, también en nuestra bella tierra ha llegado a plantarse la bota militar de la dictadura comunista cuya consecuencia se ha traducido en prácticamente la ruina de nuestra patria tanto en lo material como en lo espiritual.
Lo que estamos viviendo los venezolanos es la implementación del modelo comunista en una versión más sofisticada, edulcorada, suavizada, potabilizada gracias a la colaboración de actores que se dicen democráticos, que se han aprovechado de haber salido electos en el pasado en listas de partidos democráticos o han estado vinculados con la oposición clásica pero que ahora prestan servicio a la dictadura de Maduro, así que con logística prestada por la dictadura, esta gente se abroga el derecho de representar a los venezolanos opositores, creando un teatro de marionetas para lograr derrumbar las sanciones impuestas por la comunidad internacional al tirano de Maduro.
Lo cierto es que preocupa profundamente el alcance que esta teniendo esta nueva avanzada de actores opositores que están haciendo el juego a Maduro prestando plataformas de negociación a nivel internacional para quebrar las condenas internacionales al régimen de Maduro, sin dudas lo que se escucha tras bastidores es que están siendo financiados sus viajes por financistas del régimen de Maduro o alguien interesado en tratar de arreglar las cosas para provecho de sus empresas, pero ni modo, el final de todo estos es terminar de aniquilar la libertad de los venezolanos.
Así que buena parte del liderazgo opositor que conocemos está trabajando para derrumbar las sanciones contra Maduro, por demás muy justificadas dada la cuenta el régimen tiene pendiente severas denuncias ante la Corte Penal Internacional, la ONU y otros organismos internacionales, por delitos considerados de lesa humanidad, así que se trata de entender por qué opositores conscientes del peligro que representa brindar plataforma de legitimidad a Maduro arriesgan el avance que se ha tenido para llevar el caso venezolanos a muchos países del mundo y que estos hayan tomado una posición de sancionar al régimen de Maduro por criminal.
Así que esta gente de la oposición está jugando con candela sin duda arriesgando la libertad de todos los venezolanos, ya que si la comunidad internacional, por medios de fake o falsedades, logra ser convencida de que en Venezuela se han arreglado las cosas, lo más seguro es que el sistema de sanciones contra la dictadura podría caer, pero además todas las denuncias ante la CPI terminarían siendo desestimadas, de eso se trata todo este entramado de acciones.
Lo cierto es que el caso venezolano no es diferente al alemán de Hitler o el japonés de Hirohito, nosotros también estamos a merced de otro dictador terrible y sanguinario que ha removido las libertades de los venezolanos, su sola presencia y la de su régimen es el principal motivo de la migración masiva de venezolanos y del exilio de más de 5 millones de ciudadanos.
El hecho de que Maduro logre una remoción parcial o total de las sanciones ayudado por la oposición que conocemos no va a cambiar la realidad de los venezolanos que perdieron a sus familias y parientes producto de los crímenes sistemáticos de funcionarios del régimen, sin contar las muertes producidas por la negligencia hospitalaria. Hablamos de cientos de miles de víctimas, así que el avance de las llamadas negociaciones lo único que conseguirá es blindar al régimen de Maduro, pero además hacer rico a otros cuantos que están vinculados a esos procesos de negociación.
La oposición venezolana en términos generales tampoco debe ser considerada como una unidad absoluta, ni creo que lo vuelva a hacer jamás, se habla de grupos que representan factores de poder, de ese modo tenemos a los opositores llamados alacranes, luego están los opositores que en su buena fe están participando en las elecciones convocadas por la dictadura, hay que agregar la oposición vinculada a la Asamblea Nacional de 2015 que preside el presidente encargado Juan Guaidó y finalmente la oposición del grupo que figuran María Corina, Ledezma y Diego Arria.
Todas estas oposiciones tienen su tamaño dependiendo del alcance de sus convocatorias. En el caso de Guaidó, ha venido experimentando un descenso pronunciado en su apoyo recibido porque buena parte de su agenda política vinculada con la salida de Maduro ha tenido severos contratiempos, pero además están los cuestionamientos al manejo financiero en términos generales. Mucha gente opina que hay poca transparencia en la rendición de cuentas de los bienes recuperados, también hay mucho desconocimiento sobre los montos y cómo se gasta el dinero de la ayuda humanitaria internacional. Lo cierto es que los venezolanos no tenemos ni idea de cuánto realmente es lo que la comunidad internacional gasta en ayudarnos, pero además desconocemos cuáles son las ONG y cuánto dinero reciben para apoyar a los migrantes. ¿Por qué no han hecho algo tan fácil como publicarlo en una página web, así que a la final creo que estas circunstancias realmente han afectado al señor Guaidó, quien presumo que no tiene nada que ver con estos inconvenientes, pero se trata de que él es presidente encargado de Venezuela, y en teoría debería tratar de ayudar a los venezolanos a entender estos aspectos. La información financiera y la transparencia administrativa es vital para todo movimiento político que quiera lograr voluntades y voluntarios dispuestos a llevar a la acción una idea tan exigente como la liberación de Venezuela.
Con relación al resto de las oposiciones solo puedo comentarles que en mi opinión no tienen el tamaño siquiera para lograr ser interlocutores válidos, los llamados alacranes son prácticamente insignificantes, quizás el sector de Capriles y Falcón que son la parte de la oposición que impulsa el diálogo y la participación electoral, quizás ellos tengan algo más de músculos como para lograr agregar elementos a la agenda de negociación, el cuarto factor representado por María Corina, Ledezma y Arria están bastante jalados a la derecha política, luce bastante difícil que ellos puedan lograr movilizar bases populares pese a los esfuerzos de María Corina de potabilizar su propuesta política.
Quizás el escenario termine por generar una quinta oposición pero teniendo como eje el exilio. Entre los puntos en común de este grupo está el mantener las sanciones a Maduro y también impulsar su condena en la CPI. Con estos dos objetivos en mente la nueva oposición es probable que logre cristalizar un movimiento opositor fuerte y robusto que no necesariamente aspire a algún cargo dentro del país, pero que sí será un factor decisivo en la agenda internacional ya que si logra organizarse puede en principio lograr boicotear la agenda de los opositores a favor de Maduro.
La ventaja de esta quinta oposición es que sus intereses están enfocados en los países donde residen, así que un grupo de estos opositores que opere por ejemplo dentro de Estados Unidos podría resultar en una combinación de partidarios venezolanos tanto de los republicanos como de los demócratas, unidos por la meta común de lograr enjuiciar a Maduro y sus funcionarios en la CPI, harían mucha bulla y difícilmente una agenda a favor de reducir las sanciones al tirano podría tener algún tipo de receptividad en el gabinete del presidente Biden. Es el mismo caso en España, donde los venezolanos pueden ser un factor disuasivo de los proyectos de podemistas dentro del gabinete del PSOE. En donde esté presente, la quinta oposición no permitiría concesiones al régimen criminal de Maduro. Pienso que esta oposición, que no está nada lejos de ser una realidad, podría adquirir la forma política de Congreso en el exilio, asamblea en el exilio, como quiera que se llame, lo importante es que será otra oposición totalmente diferente a la que conocemos, incluso formada por venezolanos no nacidos en Venezuela o que nunca la conocieron pero que están en su derecho de luchar por su libertad.
Finalmente, quiero recordarles a la comunidad internacional que el hecho de que los venezolanos aspiremos a recibir una ayuda internacional para liberarnos de Maduro es igual a lo que hicieron los franceses e ingleses cuando los nazi los invadieron y fueron socorrido por los aliados hasta terminar con los nazi en el simbólico día D. Lo cierto es que los venezolanos no podemos luchar solos contra la dictadura de Maduro, tan solo su régimen tiene un ejército de 1 millón de milicianos armados dispersos en todos los lugares de Venezuela con el objetivo de controlar con carta abierta violatoria de derechos fundamentales, ellos han convertido a Venezuela en un estado policiaco, en una cárcel, así que reitero que tenemos el derecho a recibir el respaldo de los aliados y a tener también un Día D para Venezuela. Los venezolanos podemos aspirar al rescate de los aliados de la invasión comunista que hoy asola el territorio, no sólo estamos invadidos por los cubanos, también por los rusos, chinos e iraníes, sin duda es tiempo que las naciones democráticas del mundo observen con cuidado las cosas en Venezuela, y retrocedan al pasado para encontrar las soluciones que les trajeron libertad a sus pueblos, son esas soluciones las mismas que hay que aplicar para Venezuela.
A continuación les copio el video de mi participación en el programa del diputado Pirela, el video está completo con el objetivo de que también observen la participación de sus otros participantes. Me despido deseándoles libertad, nos leemos en una próxima ocasión en El Nacional.