No hay por qué menospreciar los 400.000 votantes venezolanos en el extranjero que pueden hacerlo en la elección primaria del 22 de octubre por el hecho de que para algunos es una cantidad insignificante. Sin embargo, no es así, estos son más votantes que los que tienen 6 estados independientes unos de otros: Nueva Esparta: 382.812; Apure: 372.974, La Guaira: 310.199; Cojedes: 271.227; Delta Amacuro: 129.407; Amazonas: 114.151. RGM

En la cabecera de esta nota se concreta un hecho real, es que a través del correr del tiempo se hace más notorio cómo ha ido creciendo el número de compatriotas dispuestos a participar en la elección primaria de este 22 de octubre. Por allí, precisamente, había que empezar: que los ciudadanos despertaran y entendieran que tenían que dejar de lado el pesimismo y, por otra parte, el hecho fundamental en este escabroso proceso de reconstrucción de la patria es el juicio injustamente severo en contra de los sectores opositores que luchan desde hace un cuarto de siglo por retornar a la democracia.

Es evidente que este entusiasmo se debe en buena medida al equilibrio y al denodado esfuerzo llevado a cabo por hombres y mujeres probos desde la Comisión Nacional y las regionales de Primaria. Ellos han hecho una labor de filigrana; han superado muchos inconvenientes sin estridencias y recursos económicos de pobreza extrema. Lidiar con trece candidatos presidenciales, igual o más números de partidos políticos, además de grandes sectores de la sociedad civil es cuestión complicada, embrollada, delicada; pero dejémoslo hasta aquí…

Al mismo tiempo van los ataques junto con las malas intenciones que pululan por diferentes frentes. Si apelamos a un ejemplo o a dos, es habitual escuchar sobre la necesidad de que las fuerzas de la oposición se unan para enfrentar las agresiones y patadas del régimen a la Constitución para inhabilitar candidatos. De todos modos, los trece candidatos presidenciales firmaron un trato de llegar a acuerdos cuantas veces ellos lo consideren necesario. La unidad no es que sea mala por sí misma, pero no debe imponerse a juro. Por eso insisto en el método de los acuerdos. En consecuencia, a inicio de esta semana llegaron a un convenio político los partidos Primero Justicia y Un Nuevo Tiempo; por cierto UNT no tenía previsto participar en la elección primaria ni apoyar la candidatura de Henrique Capriles. Por lo demás, es importante que surja otra candidatura con brío y posibilidades de triunfo. ¿Cuáles razones concurren para que ese pacto sirva de aporte a la primaria y posteriormente en las elecciones presidenciales? No tengo dudas de que estos dos partidos redoblarán sus esfuerzos en la búsqueda de prosélitos en la elección del 22 de octubre que de no favorecer los resultados se conectarán con todos sus seguidores a la fórmula triunfadora por el rescate de la democracia en una lucha sin punto final a la vista.

Como último recurso, se rumora la posibilidad de que el gobierno, en vista a su asfixia, impulsará unas megaelecciones donde se fusionen las presidenciales con las de gobernadores, alcaldes y diputados. Según opinión muy respetable del profesor Jesús Seguías: “No es lo mismo que se cuente Maduro solo en 2024 a que se cuenten todos los chavistas que aspiran a gobernaciones y alcaldías. Necesita tener a todos los suyos lanzados a la calle defendiendo sus propios intereses, con lo cual arrastraría también los votos que él necesita para blindar su victoria. Generalmente, los verdaderos movilizadores del voto son los candidatos a gobernadores y alcaldes”. No comparto esta opinión del profesor Seguías porque esta es una elección de una sociedad frustrada, hambrienta, sin porvenir, llena de odio y rencor en contra del socialismo y quienes lo representan. ¿Usted cree profesor que los ciudadanos van a obedecer a un gobernador o un alcalde corrupto, socio de todos los males del país, y por esa razón van a votar por Nicolás Maduro? ¿Usted cree que eso es posible? Me estoy refiriendo al venezolano de 2023; esto debe tenerlo presente. Este coterráneo de hoy no tiene semejanza con el venezolano de apenas dos años atrás…

Lo que está planteado hoy en el país es una lucha de los venezolanos, de los ciudadanos en contra del régimen, en contra de lo que huela a socialismo. De manera que es probable que el desespero lleve al gobierno a una megaelección; pero eso finalmente no le va a funcionar. Nada donde tenga que contarse el régimen tiene posibilidad de triunfo. Incluso con cualquiera que sea el candidato de la oposición.

[email protected]

 


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!