Es un sueño no cumplido. Todos los venezolanos, fuera o dentro del país, desean un Año Nuevo (ya no la Navidad) sin presos políticos. La principal razón es que ninguno debe estar tras las rejas, no hay razones, no hay delitos, no hay motivos.

La encomiable labor del Foro Penal Venezolano ha servido para alertar sobre la situación que vive cada uno de los presos políticos del régimen.

Han informado que 2019 fue uno de los más tristes porque las cifras, en vez de bajar, aumentan. Todo indica que este año terminará con 388 reos de conciencia.

Hay nombres que resaltan, pero ninguno es más importante que otro. Por más que se negocie, o por más que se ponga en una lista para sentarse en una mesa con el gobierno, bueno es insistir en que no son monedas de cambio.

Ninguno debe estar preso, sufriendo penurias y torturas, perdiendo su salud física y mental, su vida.

Es momento de que como sociedad entendamos, nos sensibilicemos con lo que sufren esas familias. Es el momento de exigirle al régimen que esto no puede seguir ocurriendo.

Y es obvio que esa exigencia nada hace con tirarle a la cara de los jefes rojitos las miles de condenas que todos los días emiten los organismos internacionales, los países y las ONG mundiales ante esta situación.

Prueba de ello es que persiguen al diputado Gilbert Caro una vez más y lo desaparecen.

Es un régimen caradura, eso ya está más que comprobado. Así que lo que hay que exigir es el punto final de esta persecución, porque aunque ellos insistan en llamarse gobierno, lo cierto es que lo único que les mantiene en el poder es su incuantificable maldad.

Pero en Venezuela los buenos son más, y 2020 debe ser el año decisivo para que todas las familias vuelvan a recibir a cada uno de los presos políticos en su seno.

Es una tarea pendiente que tenemos, es una lucha que se debe dar, porque cada uno de ellos ha puesto su vida en busca de la libertad y con el mismo empeño los venezolanos de bien deben rescatarlos.

Con su libertad, será libre Venezuela de 20 años de oscurantismo y brutalidad.


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