En pleno siglo XXI la sociedad parece seguir entretenida con pan y circo. La farándula, el fútbol y los asuntos superfluos resultan ser más importantes que la vida. Eso ha quedado en evidencia durante este Mundial de Qatar 2022, en el que casi todo el mundo deportivo mantuvo silencio en lo que respecta a la condena a muerte que pesa sobre el jugador iraní Amir Nasr-Azadami por reivindicar los derechos de las mujeres. Ni la FIFA, ni ninguno de los grandes nombres como Messi o Cristiano Ronaldo, etc., utilizaron su influencia para visibilizar el drama que se vive en Irán y tratar de evitar que sea ejecutado el joven de tan sólo 26 años.
La FIFA no suspendió el partido final en señal de protesta y todo siguió como si nada en un mundo que celebra las victorias deportivas y voltea la cabeza para no ver la realidad.
El video publicado en TikTok por un muchacho argentino llamado Rodrigo Rumi puso sobre el tapete la hipocresía de una sociedad que parece haberse deshumanizado. Rumi lamentó que el mundo del fútbol guarde silencio ante la condena de Amir Nasr-Azadami. La reflexión del tiktoker no tiene desperdicio e hizo que varios personajes conocidos, entre los que se incluyen a Shakira, se sumaran a las voces que expresan su pesar por el cruel destino que le aguarda al iraní sólo por defender los derechos humanos.
Estoy orgulloso del trabajo de la selección de Argentina en esta victoria histórica, pero lamento que mientras ese evento ocurría, las personas más poderosas del fútbol no hayan hecho nada, ni intenten hacerlo para ayudar a salvar la vida de Amir Nasr-Azadami, quien estuvo dispuesto a sacrificarse para luchar por la libertad en un país en el que son varias las personas que han sido sacrificadas.
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