Desde tiempos inmemoriales el número 7 ha estado asociado a la vida del hombre como ningún otro número y su influencia en el género humano ha sido significativa.

Desde el Libro del Génesis, que es el primer libro de la Biblia, ya se habla de 7 períodos traducidos como días, para la creación del mundo. Los 7 años que duró la construcción el Templo de la sabiduría de Salomón y el candelabro asociado de 7 brazos, conocido por los israelitas como Menorá.

Así mismo, las 7 colinas sobre las que se fundó Roma, los 7 sacramentos de la Iglesia Católica: bautismo, confirmación, penitencia, eucaristía, sagradas órdenes, matrimonio y extremaunción.

Hasta en la numerología, ciencia que estudia el significado oculto de los números, el 7 denota pensamientos profundos, búsqueda de perfeccionamiento intelectual y espiritual, así comola introspección y la capacidad de conectarse consigo mismo.

Para Pitágoras era el número perfecto y Dante Alighieri, poeta y escritor de la Divina Comedia, lo usaba en sus obras.

El septenario, nombre que se le da a los 7 astros visibles y clásicos en Astrología y, por extensión, a todo aquello que consta de 7 elementos, nos muestran los astros visibles, que conforman el sistema solar y los siete pecados capitales asociados a ellos, la soberbia al Sol, Saturno con la avaricia, con la lujuria a Venus, Marte con la ira, la insaciable gula con Júpiter, la envidia con Mercurio y la cercana Luna con la Pereza. Y de igual forma, las 7 virtudes cardinales que se contraponen a ellos: humildad, generosidad, castidad, paciencia, templanza, caridad y por último diligencia.

Sin dejar de lado que los días de la semana, las fases de la luna y los famosos mares que conforman nuestro mundo son todos en número de siete.

Hasta las artes y el entretenimiento se han visto influenciados por el 7. Las famosas novelas, llevadas al cine, del 007, el agente secreto James Bond del escritor Ian Fleming. Pulgarcito y las botas de 7 leguas, de Charles Perrault. Y hasta los enanitos de Blanca Nieves eran en un número de 7.

Por tanto, el 7 no podía faltar en la aviación y por ello el sistema de nombres de Boeing para aviones comerciales Jet han tomado la forma de 7×7 (x representa un número) y todos los modelos vendidos a partir del Boeing 707 en 1957, excepto el Boeing 720, se les han asignado todas las designaciones de modelo del 707 al 787.

Nada mal para las ventas de la empresa Boeing, una de las empresas de aviación mas importantes del mundo, el cual solo de la Serie 737 ha recibido órdenes de compra por unas 17.565 unidades,para un total de 23.949 aeronaves de la serie 7×7 a lo largo de estos 64 años de producción.

Lamentablemente, la serie 737 MAX tuvo un mal comienzo con 2 accidentes fatales en los que fallecieron 346 personas, el vuelo 610 de Lion Air el 29 de octubre de 2018 y el vuelo 302 de Aerolíneas Ethiopes el 10 de marzo de 2019. Esto mantuvo en tierra a todas las aeronaves 737 MAX durante ya casi 3 años en algunas partes del mundo.

Recientemente, mientras escribíamos este artículo, hubo un accidente en China donde el vuelo MU5735 en un Boeing 737-800 NG de la aerolínea Eastern China, con solo 6 años de uso, se precipitó a tierra con 132 personas a bordo. De manera inexplicable y a una rata de descenso de 31.000 pies por minuto, se estrelló contra la tierra de manera casi totalmente vertical.

El NG es la serie anterior al MAX y tiene uno de los mejores registros de seguridad entre todos los aviones comerciales del mundo, con solo 11 accidentes fatales de más de 7.000 aviones entregados desde 1997, según la consultora de aviación Cirium.

En la siguiente foto podemos ver alineados 8 aeronaves de modelos de la serie 7×7, de adelante hacia atrás: No 1: 707, No2: 717, No 3: 727, No 4: 737-900, No 5: 747-8F, No 6: 757, No 7: 767-300F y el No 8:-777-300ER.


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