I

Hemos sido testigos los últimos años del resurgimiento más que justificado en contra de la esclavitud en siglos pasados. Persiste el racismo como impreso en el ADN de mucha gente, cosa que siempre me ha espantado. Pero en esta ocasión me asusta aún más que ese monstruo siga vivo. Y lo que es peor, que Venezuela sea parte de esa aberración.

Sí, soy hija de margariteña con fama de exagerada, pero verán que lo que les voy a contar no es hipérbole literaria ni mucho menos. ¿Se imaginan a alguien sometido a la esclavitud en estos tiempos? Sé que en este país tenemos muchos motivos para no querer a los médicos de la misión cubana, y no voy a defender a ninguno, pero hay que saber la verdad, o al menos así me enseñaron en la escuela y en mi casa.

Los médicos, deportistas, entrenadores, técnicos y demás profesionales que la dictadura cubana manda a cientos de países trabajan en condiciones de esclavitud. Primero, los escogen y los amedrentan con alguna cosa, incluso con hacerles daño a sus familias, para que acepten salir de Cuba como parte de estas misiones. Los “negocian” como viles tratantes de personas, pues del sueldo que acuerdan con el gobierno receptor solo le cancelan 25%; el otro 75% va directo a los bolsillos de los dictadores.

Están obligados a “servir” donde los pongan en las condiciones que los pongan por al menos 8 años, pero si se les ocurre la brillante idea de “desertar” los tratan como traidores a la patria, les prohíben regresar a su país por 8 años so pena de ponerlos presos.

II

La organización de defensa de derechos humanos Prisioners Defenders ha recogido en los últimos tres años 1.111 testimonios de cubanos que se han atrevido a escapar de esta esclavitud con la que la dictadura cubana gana dinero. Es tan importante este comercio de personas que se ha convertido en la principal fuente de ingresos del nefasto gobierno comunista, pues a través de lo que le pagan por este “personal” solo en 2018 recibieron 8.500 millones de dólares.

Qué pena que el gobierno chavista (recuerden que el que trajo a los médicos cubanos fue Hugo Chávez) sea parte de esta práctica degradante de la condición humana. Hay muchos gobiernos cómplices y yo no me explico por qué se prestan para esto. Entiendo que aquí lo hagan estos gobernantes que han demostrado ser violadores de derechos humanos hasta con su propia gente, pero hay países en África, está Argentina, Brasil y otros latinoamericanos. ¡Cuánta injusticia!

Esta investigación que por primera vez se llevó a instancias internacionales en 2019 está de nuevo en el tapete por el testimonio desgarrador de una cubana empleada en una gran y famosa empresa de cruceros por Europa. La firma les retiene sus pasaportes y se encargan de mandar el dinero al gobierno cubano con la excusa de que es lo que firmaron en contrato con el gobierno cubano. Así que no solo hay países que se benefician de esta locura, sino empresas privadas famosas también.

¿Nos vamos a quedar sin denunciar? Yo no. Creo que todo tipo de sujeción y humillación de un ser humano, por más mínima que parezca, es detestable. Esto debe acabar, la dictadura de Cuba debe acabar. La de Venezuela también. Lamentablemente, son caimanes del mismo caño

III

Este aparte es para agradecer. Muchos han colaborado conmigo y lo siguen haciendo. Tengo suficiente para la próxima quimio y sé que muchos están pendientes de mí. Sigo.

 


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